POLICIA
Haba planeado todo al detalle

El niño que degolló a su compañero confesó el crimen

Aunque ya le había contado a los policías los detalles del crimen, el menor, que se encuentra hospitalizado, hizo el relato de los hechos ante el juez de Instrucción a cargo de la causa. El Jueves se realiza una marcha.

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Corrientes - El niño de 12 años acusado de asesinar a su compañero de colegio confesó esta tarde ante el juez de Instrucción Oscar Anocíbar ser el autor material del crimen. La declaración fue tomada por el magistrado en el Hospital Billinghurst de la ciudad de Ituzaingó, donde el menor se encuentra internado.

Fuentes judiciales confirmaron a la agencia DyN que el chico repitió el testimonio dado ante la policía cuando fue confrontado con pruebas, según las cuales su primer relato de los hechos era una falsedad montada para despistar a los investigadores.

"El niño confesó por segunda vez que es el autor del homicidio de Agustín Esteche, de quien quería vengarse por las bromas de mal gusto que recibía en la escuela, frente a otros chicos", indicó un vocero del juzgado local.

Del interrogatorio, encabezado por Anocíbar, participaron los padres del niño, un asesor de menores y el fiscal que entiende en la causa, Eugenio Balbastro, quien reiteró la calidad de "inimputable" del menor.

"Por su edad el niño no puede ser condenado, pero eso no implica que no podamos continuar con la instrucción como en cualquier hecho donde se haya cometido un delito de acción pública", indicó el fiscal.

En tanto, la vicerrectora del colegio Alberdi de Ituzaingó, María Angélica Fabbri, al que asistían el niño muerto y el compañero que admitió ante la policía ese crimen, dijo hoy que "nada hacía prever que algo así iría a pasar" y manifestó que ambos tenían una conducta "normal".

El niño que resultó muerto en el episodio "era un muy buen chico, era de los denominados vagos buenos. Siempre andaba por mi despacho, era muy colaborador y solidario. Había repetido el año, pero tenía mucha voluntad y carisma", sostuvo Fabbri.

En tanto, manifestó en declaraciones radios locales que el niño que admitió el crimen "era el excelente alumno, el de las buenas notas, no era antisocial, era de juntarse, de hacer amistades".

"Nunca alertamos nada anormal entre los dos, ni los profesores, ni los preceptores, ni la mamá de Agustín. Nada hacía prever que iba a pasar esto", destacó Fabbri.

"Recién hoy tendremos un equipo de psicólogos para la contención. Es tarde, pero son los tiempos del interior", agregó.

El Servicio Educativo de Prevención y Apoyo (SEPA) del Ministerio de Educación envió a Ituzaingó un equipo multidisciplinario de psicopedagogos, psicólogos y asistentes sociales que trabajarán en la contención de la comunidad educativa de la escuela Alberdi.

El padre del niño muerto dijo que el menor de edad que admitió el crimen aseguró a la policía que "no había cumplido su misión", por lo cual consideró que "seguían otros chicos del mismo entorno escolar".

Anselmo Esteche, un trabajador desocupado de condición humilde, reveló que el niño de 12 años que admitió haber matado a cuchilladas a su hijo Agustín pensaba "vengarse" de al menos tres niños que asistían a la escuela Juan Bautista Alberdi de la ciudad de Ituzaingó.

"Así me lo señalaron los investigadores policiales, que además encontraron en la casa del asesino (por el niño) no una sino dos fosas preparadas para esconder los cuerpos", sostuvo Esteche en declaraciones radiales.

Por eso reclamó que "si no pueden castigar al asesino de mi hijo por lo menos que paguen sus padres", dado que "su hijo me arruinó la vida para siempre".

"El chico que mató a mi hijo lo pensó todo fríamente, primero se bañó, luego lo esperó y después lo acuchilló por la espalda cuando estaba sentado ante la computadora", relató Esteche en declaraciones radiales.

Dijo además que la muerte de Agustín, de 13 años, fue fruto de un engaño, ya que su compañero "lo invitó a estudiar y le mostró un juego de computadora violento que utilizó como modelo para matar".

Esteche y su esposa Mirta convocaron a una marcha del silencio para el jueves, cuando se cumplirá una semana de la tragedia que mantiene en estado de conmoción a la comunidad de Ituzaingó, considerada la capital de la energía, por haber sido desplazada allí la represa de Yacyretá.

Fuente: DYN