POLICIA
Allanaron propiedades de Ariel Vilan

Hay tres muertos, un suicida y ningún sospechoso

Forza y Vilán, generosos aportantes a la campaña oficialista, están bajo tierra. En la superficie, la policía deambula sin saber a qué mafioso buscar. Galería de fotos

La policía durante los operativos
| Télam

La Justicia porteña trata de determinar si alguien indujo al suicidio a Ariel Vilán, sindicado como testaferro de Sebastián Forza, uno de los tres empresarios asesinados el 13 de agosto pasado en General Rodríguez, así como las razones que lo llevaron a tomar la decisión, mientras fueron allanados la droguería unifarma (Juan B. Justo 6186), de la que Vilán era titular, y el departamento en el que vivía el empresario en la calle Arce al 700 del barrio Las Cañitas.

Fuentes judiciales ratificaron a DyN que las pruebas colectadas hasta ahora "parecen confirmar que la muerte de Vilán fue un suicidio, porque nadie vio presencias extrañas ni a nadie que lo acompañara en los momentos previos" a que su cuerpo cayera al vacío, aunque también admitieron que se buscará determinar si pudo haber sido instigado a adoptar esa decisión.

Vilán (34) murió en la noche del domingo último al tirarse desde un departamento del noveno piso de un edificio de la avenida San Juan 4129, en el barrio de Boedo, donde vivían su madre y un hermano. La muerte de Vilán -supuestamente vinculado comercialmente a Forza (34) en la venta de medicamentos-, sumó más misterio en torno al triple crimen de General Rodríguez.

Allí fueron encontrados Forza, Damián Ferrón (37) -empleado de una droguería- y el publicista Leopoldo Bina (35), ejecutados de 16 balazos, en el marco de una venganza cuyas hipótesis más importantes están vinculadas a la venta efedrina, utilizada como precursor para la fabricación de drogas de diseño o de medicamentos adulterados.

Solange Bellone, viuda de Forza, reiteró en declaraciones al canal de cable TN que Vilán no era testaferro de su marido y "no tenía relaciones con nosotros". También evaluó que Vilán se habría quitado la vida porque "para mí él tenía muchas deudas y se vio reflejado en lo de Sebastián porque también tenía deudas". La causa por la muerte de Vilán, quien tenía una farmacia declarada en quiebra, recayó en el juez de instrucción Marcelo Salvá, con intervención del fiscal Marcelo Solimine.

Las fuentes judiciales dijeron a DyN que el fiscal dispuso "una batería de medidas de prueba y diligencias" y puso "prácticamente a todo el personal a trabajar en esta causa". Si bien las primeras pesquisas apuntan a un suicidio, el fiscal trata de determinar si las causas que llevaron a Vilán a esa decisión fueron inducidas -lo que configuraría el delito de "instigación al suicidio"- y, en tal caso, qué conexión tiene el episodio con el triple crimen de Rodríguez.

Tras enterarse del triple crimen, Vilán abandonó su departamento de la calle Arce 768, en Las Cañitas, y se fue a vivir con su madre. Y en los últimos días habría manifestado su preocupación por lo que ocurrió con Forza y reiteraba que no tenía nada que ver con el hecho.

En las últimas horas la Justicia ordenó allanamientos en una droguería de Vilán, en Juan B. Justo al 6100, en el barrio de Floresta; en el departamento que tenía en Las Cañitas y en la vivienda donde moraba últimamente, también habitada por su madre y su hermano, en Boedo. Trascendió que hubo secuestro de documentación de interés para el expediente.
En el marco de la investigación por el triple crimen, el abogado de las familias de Ferrón y Bina, Miguel Angel Pierri, reiteró que pedirá que la causa pase al juzgado federal "dado que se juzgan delitos como sicariato, narcotráfico y falsificación de medicamentos".

"Llegó el momento de que empecemos a hablar de medicamentos, de ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos y Alimentos) , de precursores químicos, de sicariatos, de cartelizaciones", sostuvo el abogado en diálogo con Radio Continental.

Por otra parte, aunque se informó que Pierri había dicho que Forza se reunió con Vilán el 7 de agosto, día en el que desaparecieron los empresarios, desde su estudio jurídico aclararon que en realidad el letrado había mencionado a Bina.
"Forza y Vilán se reunían seguido porque se conocían, pero no mantuvieron ningún encuentro del día de la desaparición", insistieron.

En realidad, tal como había informado a DyN Pierri, la reunión se produjo alrededor de las 11 del 7 de agosto cuando Forza se encontró con Bina en un café situado en la esquina del club Liniers. El abogado estimó que Ferrón y Bina "llegaron tarde al 'negocio' que supuestamente ya realizaba Forza, y lo pagaron con sus vidas".

Ferrón conocía a Forza porque ambos trabajaban en el rubro de medicamentos y a Bina porque le vendía medicamentos en el club donde éste practicaba pesas y así se contactaron los tres. Para la querella representada por Pierri hay una persona que sabría más de lo que dice: el ex policía José Luis Salerno, dueño de una droguería en la que trabajaba Ferrón.

En ese marco, las fuentes señalaron que familiares de Ferrón llamaron a Salerno para avisarle cuando el muchacho desapareció, ante lo cual el ex policía habría dicho "avísenme si necesitan algo", con un presunto tono de preocupación.
Asimismo, se supo que el cabecilla y miembros de un grupo de narcos autodenominado "La Banda del Rey" fueron detenidos en un operativo hace tres años en un departamento lindero al de Vilán.

El dato fue recordado por fuentes de Gendarmería Nacional, que señalaron a DyN que el operativo, donde se secuestraron mil dosis de LSD y pastillas de "éxtasis", fue en el departamento "A" del séptimo piso del edificio de Arce 768. Entonces fueron detenidas varias personas en ese edificio y otros de Palermo, Núñez y Belgrano.

Fuente. DYN