María José Muñoz, la hija del encargado del edificio donde fue asesinada la odontóloga Mariela Frydman, dijo que aprovechó las dos semanas que estuvo presa por el crimen para entablar una relación amorosa y denunció que su detención se debió a su aspecto y a su condición sexual.
Así lo reveló en una entrevista con Diario PERFIL, en la cual detalló que su nueva novia se llama Mónica y reveló que milita en el radicalismo, lo que hizo que el presidente de la juventud partidaria, Juan Nosiglia -el hijo de Enrique "Coti" Nosiglia- la llamase. Por su militancia, tienen una visible cicatriz en la cabeza que le quedó de un enfrentamiento con peronistas.
Muñoz, a quien le dicen Leo por su signo, afirmó que fue detenida por su condición sexual y por su aspecto. Desmintió ser boxeadora y admitió que hace "fierros".
Fue detenida por el crimen de la dentistas, que fue golpeada y apuñalada en su bañera el 26 de noviembre último. En la cárcel conoció a su nuevo amor: Mónica, una chica rubia y ojos verdes. Ella fue la primera que le brindó contención emocional. Se terminaron de poner de novias por teléfono, una vez que Muñoz fue liberada por falta de pruebas.
" Mi condición sexual ayudó para que se diga que tenía relaciones con ella, me sentí muy discriminada. Mi vida nunca va a ser igual y perdí muchas cosas. Conmigo hicieron una injusticia y lo que más me duele es vivir vigilada. Tengo miedo de que me detengan y me siento atrapada cuando el único que debería juzgarme es Dios", dijo Muñoz.
"Sólo había meras sospechas y no había causas objetivas para extraerle sangre, muestras de pelo y llevarla a indagatoria”, explicó Donato Perillo, su abogado y compañero de militancia en el radicalismo.
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