POLICIA
drama en olivos

Justiciero: un abogado mató a un ladrón y se tiroteó con otro para evitar un robo

Fue sorprendido cuando se subía a su BMW. Les disparó al escuchar que uno de ellos dio la orden para que lo asesinaran. El fiscal entendió que actuó en legítima defensa.

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Escena. El ladrón recibió un disparo en el pecho y murió en el asiento del conductor, cuando intentaba huir en el auto robado. | cedoc

“Subite porque esto es un secuestro”. “Matalo”. El abogado escuchó estas frases de boca de los dos delincuentes que lo rodeaban y empezó a forcejear para evitar que se lo llevaran cautivo. Luego agarró el arma que tenía guardada en la guantera y disparó contra uno de ellos. Lo mató. Y después se tiroteó con el cómplice hasta que huyó. Esta secuencia fue narrada por el letrado ante el fiscal de la causa, que determinó que el hombre de 43 años siga en libertad.      

El fiscal de Vicente López a cargo del caso, Martín Gómez, le tomó en la madrugada de ayer una declaración testimonial al abogado de 43 años  domiciliado en Capital Federal, ya que por el momento considera que es una víctima del hecho y todo indica que actuó en legítima defensa, por lo que el letrado (se reserva la identidad) quedó en libertad.

Según la declaración del abogado, todo se inició alrededor de las 21.30 de la noche del jueves cuando salió de la sede del Sindicato de Empleados Textiles de la Industria y Afines, en la calle Italia 1666, en la localidad bonaerense de Florida. El hombre se subió a su auto BMW, y fue abordado por un delincuente que bajó de un Toyota Etios, donde lo esperaba un cómplice.

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La víctima entregó el celular, el reloj y le dijo que se lleve el auto, pero el asaltante le manifestó: “Subite porque esto es un secuestro”. El letrado contó en su declaración que forcejeó porque no quería subir al auto y en ese momento apareció el segundo delincuente que le sacó la billetera y también le pidió que ascendiera al BMW.

“¡Matalo!”, recordó que gritó el segundo ladrón (que ya estaba sentado en el asiento del conductor del BMW) a su cómplice. De acuerdo con la declaración, en ese momento el ladrón que estaba en el interior del auto, cargó la pistola 9 milímetros con la que lo apuntaba montando la corredera.

El abogado le dijo al fiscal que en ese momento vio peligrar su vida, por lo que tomó de la guantera de su auto el revólver Colt calibre 38 -del que es legítimo usuario- y le disparó un tiro en el pecho.

Luego, empujó y tiró al piso al segundo asaltante, corrió a refugiarse detrás del Toyota Etios en el que habían llegado los delincuentes y desde allí mantuvo un intercambio de disparos hasta que este ladrón huyó corriendo.

El letrado también contó que vio que el asaltante al que había baleado dio marcha atrás con su auto hasta que finalmente se desvaneció y murió en el asiento del conductor. Todos estos dichos tienen que ser corroborados por las pericias y por las evidencias para determinar la veracidad de esta versión y concluir que actuó en legítima defensa.

Marcelo David Alfredo Arcuaz Di Giorgio (ver aparte) estaba prófugo desde diciembre.


Se había fugado de la cárcel

Al ladrón muerto se le encontró entre sus pertenencias un DNI y un registro de conducir con una identidad falsa. Luego se pudo corroborar que se trataba de un prófugo de la Justicia.

Marcelo David Alfredo Arcuaz Di Giorgio tenía  32 años y era conocido como “Piquito”. Según los registros del Servicio Penitenciario se había fugado el 7 de diciembre último en una de las salidas transitorias de las que gozaba en la Unidad 41 de Campana.

Cumplía condena por “robo agravado”.

Voceros judiciales indicaron que, de acuerdo con el prontuario que tiene la policía bonaerense, Arcuaz tenía antecedentes por “entraderas” y robos a bancos.

Arcuaz nació el 1 de abril en 1985 y, según su legajo, tenía fijado domicilio en la calle Francisco Beiró al 3200 de la localidad de Olivos, a 35 cuadras de donde murió.