“No lo queríamos matar. Solo quisimos darle una paliza porque era un atrevido”. El principal sospechoso por el brutal asesinato de Ernesto Bensousan, el joven de 37 años que hace más de un mes fue encontrado muerto a puñaladas en el baúl de su propio auto, se quebró después de haber sido detenido y reconoció que participó del ataque junto a un patovica.
Rubén Elías Cutti Acosta, un ciudadano uruguayo de 25 años, fue apresado el viernes pasado a la madrugada en un condominio de la localidad bonaerense de Del Viso. Lo buscaban desde el 1º de abril, poco después de
que la policía encontrara el cuerpo sin vida de Ernesto Bensousan oculto en el baúl de un Chevrolet Corsa que había sido abandonado en la calle Pedro de Mendoza al 1600, en el barrio Peruzzotti de la localidad bonaerense de Pilar.
La víctima administraba un complejo habitacional que cuenta con dos departamentos y una casa, y que está ubicado sobre la calle Antártida Argentina, a unas 15 cuadras del lugar donde fue hallado asesinado de veinte puñaladas. Los alquilaba amueblados por día o semana, y cuando uno de ellos estaba desocupado vivía allí ocasionalmente para estar cerca de sus huéspedes.
Relato. Cutti Acosta era uno de sus inquilinos. Se dedicaba a la venta de droga al menudeo, al igual que el ocupante de otro de sus departamentos. Según allegados a la víctima, el viernes 30 de abril Bensousan discutió con Cutti Acosta cuando éste le contó que le habían robado el televisor. Se lo quiso cobrar y eso habría desatado la ira del principal acusado, que desde un primer momento responsabilizó del robo al otro vecino, quien además le habría sustraído la droga que tenía para vender.
“Se nos fue de las manos”, les dijo Cutti Acosta a los investigadores. De acuerdo con esta versión, el administrador del complejo habitacional se tomó a golpes de puño con el uruguayo. La pelea no pasó a mayores. Pero Cutti Acosta quedó con la sangre en el ojo y poco después regresó con un patovica amigo con la intención de darle una paliza.
Lo atacaron a cuchillazos hasta que lo mataron. Bensousan resistió hasta lo último. Murió desangrado.
Los efectivos de la Brigada de Investigaciones de Pilar, a cargo del comisario Pablo Machicote, detuvieron a Cutti Acosta y secuestraron elementos de prueba importantes: tres juegos de llaves del complejo habitacional, la llave del auto en el que apareció el cuerpo y tres teléfonos celulares pertenecientes a la víctima. El caso estaría esclarecido pero resta detener al otro sospechoso.