En los últimos días, Los Monos habían elaborado otro “plan homicida”. Pero esta vez lo hicieron desde prisión y apuntaban a funcionarios judiciales y policiales.
Fuentes policiales indicaron a PERFIL que el juez Juan Carlos Vienna y el fiscal Guillermo Camporini no fueron los únicos amenazados. También pensaban atentar contra la vida del jefe de la División Judiciales de la Policía de Rosario, Cristián Romero, y el subcomisario Luis Quebertoque, de la misma dependencia. Los informantes indicaron que en las escuchas se hace mención en particular al subcomisario. “Dijeron que lo vigilaban cuando salía de la seccional y lo seguían hasta su casa”.
Ante la revelación de este nuevo “plan homicida” –que es investigado por el fiscal Aníbal Vescovo–, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe dispuso reforzar las custodias de los jueces y fiscales que tienen causas relacionadas con el narcotráfico. Una semana atrás, este diario adelantó que un policía que había sido detenido por la fuga de un sicario de la banda rosarina mantenía comunicaciones con otros narcos a través de celulares que utilizaron en el penal.
Desde que tomaron la determinación de desbaratar el imperio del clan Cantero, tanto el juez Vienna como el fiscal Camporini reciben amenazas. Esas amenazas estuvieron a punto de cumplirse. Así lo demuestran las escuchas ordenadas por el juez Carlos Vera Barros, titular del Juzgado Federal Nº 3 de Rosario.
Ayer, el diario La Capital dio a conocer una conversación que suma preocupación a los investigadores.
“Nunca pasó en la historia de Santa Fe que mataran a un fiscal o a un juez. Hasta que no pase, todo va a seguir igual. Los dueños del poder son los jueces y los fiscales porque nunca les pasó nada”, dice Germán Almirón desde la alcaidía de la jefatura de policía. Se trata de un efectivo de la Brigada de la División Judicial, encarcelado por ayudar a Juan Domingo Ramírez, un presunto sicario de Los Monos, a escaparse el 15 de enero pasado.
Su interlocutor es Aarón Treves, preso en Coronda por un homicidio e involucrado en un caso de drogas. En la grabación interceptada por Vera Barros hay detalles de cómo sería la ejecución de Vienna –a quien se refieren como “salchicha”– y de Camporini –que en el diálogo es llamado “el bocón”–. Incluso, ya habían elegido al sicario que la llevaría a cabo: Treves, quien asegura tener la dirección de la casa del juez, le dice a Almirón: “Averiguame todo lo de Judas que yo los mando a los pibes, a Anteojito”. “Esta gente no sabe de las cosas que pueden llegar a pasar”, avisa Treves.
En la mira. Los primeros atentados estuvieron dirigidos a Vienna, el ministro de Seguridad Raúl Lamberto y otras personas ligadas a la causa. El 14 de junio del año pasado, una llamada alertó al juez de que habían pagado 500 mil pesos para matarlo. Luego del descubrimiento de túneles debajo de la casa de una persona vinculada a la familia Cantero, Lamberto y el secretario de Seguridad Pública, Matías Drivet, recibieron mensajes de texto con datos sobre sus círculos íntimos, el 12 de marzo último. Les dijeron que iban a encontrar sus cuerpos bajo tierra.
El gobernador Antonio Bonfatti expresó ayer su solidaridad con Vienna y Camporini y destacó “el trabajo que ambos vienen realizando”. Bonfatti –cuya casa fue baleada en octubre de 2013– llamó a “estrechar los lazos” de quienes “estamos del lado de la justicia, la paz y la convivencia” para “combatir a un enemigo poderoso que está mostrando sus peores armas”.
Repudian las amenazas
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, también expresó su “solidaridad” con el juez Juan Carlos Vienna y el fiscal Guillermo Camporini. “Repudio las amenazas y espero que esto sea contundente en el conjunto de la dirigencia política”, declaró.
“Hace mucho que digo que el narcotráfico en Rosario es un problema que nos preocupa a todos. En algún momento lo advertí casi en soledad y fui calificado de tremendista. Hoy, el diagnóstico es unánime y coincidente por todos”, amplió.
Otro de los que se manifestaron fue el vicepresidente del bloque radical de diputados, Miguel Bazze, quien afirmó que “es urgente que el gobierno nacional asuma la lucha contra el narcotráfico”.