La esposa del presidente de la DAIA, Julio Schlosser, fue herida de bala cuando el matrimonio fue asaltado por motochorros en el barrio porteño de Flores, tras lo cual el dirigente recibió llamados de funcionarios nacionales, entre ellos el de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El asalto se produjo anoche, pasadas las 21, cuando Schlosser llegó en su automóvil con su esposa, Susana Degetman, hasta la esquina de la calle Bonorino y avenida Eva Perón, para cenar en la casa de unos amigos. Sobre el ataque, Schlosser dijo: "No lo atribuyo a otra cosa que no sea un intento de robo".
"Aparecieron en una moto a contramano de frente; fue premeditado para robar al que viniera", aclaró el dirigente de la Delegación de Asociaciones Israelitas en Argentina (DAIA).
Además, en diálogo con radio Mitre relató: "Mi señora bajó del auto del lado del acompañante para entra a la casa de unos amigos, pasó una moto que venía de contramano con dos chicos".
"Uno de ellos le arrancó la cartera a mi señora, le pegaron un tiro y a mí me gatillaron dos veces. Cuando empecé a gritar se subió a la moto y se escaparon", detalló Schlosser.
La bala que afectó a Susana Degetman "entró en la ingle, la atravesó y le quedo alojada en el muslo", afirmó su esposo. La mujer fue trasladada primero al hospital Piñero y luego derivada al sanatorio Finochietto, donde fue intervenida quirúrgicamente. "Tras operarla, los médicos están confiados en su recuperación", destacó Schlosser.
El llamado de CFK. El dirigente recibió esta mañana la visita del rabino Gabriel Davidovich que le expresó su apoyo y una pronta mejoría para su señora, tras lo cual fue saludado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que lo llamó directamente a su teléfono celular.
La Presidenta, según Schlosser, le dijo que ponía a su disposición "todo lo que necesite".
"Yo le agradecí y le aclaré que nada más y nada menos que se trató de un hecho de inseguridad, y me ofreció su solidaridad", reveló el dirigente a un portal de noticias judío.
Schlosser fue saludado por el senador kirchnerista Aníbal Fernández y de la ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez. Además, el subsecretario de Seguridad, Rodrigo Luchinsky, se acercó hasta el sanatorio Finochietto para ponerse a disposición de la mujer.