POLICIA

Mucho Don Corleone

default
default | Cedoc

Me encantaría hablar de “las fugas” como algo heroico. Encontrar en ellas cierto romanticismo libertario.  Me encantaría, pero hacerlo evidenciaría una grandísima ingenuidad de mi parte y un total desconocimiento de los suelos y subsuelos de la problemática en cuestión. Repudio la cárcel y considero que jamás desde el encierro podemos obtener resultados positivos ni resolver controversia social alguna, pero también repudio a aquellos funcionarios y/o agentes penitenciarios que utilizan este tipo de eventos como recursos extorsivos, “botones de pánico” para llamar la atención de propios y ajenos o “mensajes mafiosos”.

“Las fugas” espectaculares son lamentablemente la inmensa minoría. “Las fugas” mayoritarias, aquellas que ahora poblaron los informativos del país, por el contrario, responden a esta lógica semiótica. Dicho desde la simplificación de las sentencias gráficas: detrás de “las fugas”, poco Houdini y mucho Don Corleone.
Luchas de poder, recelos corporativos, cajas, narcotráfico, negociación de beneficios, corrupción. Si queremos abordar con seriedad la problemática focalicemos estas falencias estructurales. No caigamos en el reduccionismo de la “heroicización” del preso.  Si luego de “las fugas” sólo reprimimos a los detenidos en falta, aumentamos las medidas de seguridad y multiplicamos nuestra intolerancia habremos sentenciado nuestra rendición frente al “apriete”. Habremos, otra vez, reconocido nuestra debilidad, inutilidad e inoperancia y principalmente nuestra nula imaginación.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite


*Máster en Criminología y Sociología Jurídico-Penal por la Universidad de Barcelona.