POLICIA
Su esposa tambin es sospechosa

Narcovalijas: el ciudadano español se declaró inocente

"No tengo nada que ver", aseguró José Ramón González Villar. Es uno de los imputados en el juicio por el contrabando de 60 kilos de cocaína a España en valijas que estaban en un vuelo de la empresa Southern Winds.

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El ciudadano español José Ramón González Villar, uno de los imputados en el juicio por el contrabando de 60 kilos de cocaína a España en valijas que estaban en un vuelo de la empresa Southern Winds, se declaró inocente ante los jueces.

"No tengo nada que ver" con el caso, dijo González Villar durante el debate oral que está a cargo del Tribunal Oral en lo Penal Económico Tres (TOPE3), y dijo que no entiende "por qué estamos (él y su esposa) teniendo que vivir estas cosas".

En la jornada anterior, los miembros del TOPE 3 se trasladaron a un sanatorio porteño para interrogar a la española Elena Tomil Batán, mujer de González Villar, que junto a su marido está acusada de ser quienes debían recibir el cargamento.

Sin embargo, debido a que la mujer tiene graves problemas de salud, sus abogados defensores expresaron a los jueces que por ahora no va a declarar.

Ese mismo día, el tribunal convocó a declarar a González Villar, quien manifestó que no se encontraba en condiciones físicas de ser interrogado porque había padecido " tres infartos y un síncope". Debido a esta situación, el TOPE 3 decidió pasar a cuarto intermedio hasta hoy.

El escándalo. Este caso se inició el 17 de septiembre de 2004, cuando cuatro valijas que tenían membrete de la Embajada de Argentina en España fueron enviadas desde Buenos Aires al aeropuerto de Barajas, en Madrid, en el vuelo 6420 de la empresa SW.

Como nadie las retiró, la Guardia Civil revisó las maletas y descubrió que en su interior había 58,900 kilos de cocaína.

Casi un mes después, las autoridades de SW denunciaron el caso ante la Justicia, que comenzó a investigar, y a mediados de febrero el caso se hizo público y estalló el denominado " narcoescándalo" porque uno de los acusados era hijo del entonces jefe de seguridad del Aeropuerto de Ezeiza, el comodoro Alberto Beltrame.

El contrabando generó un gran escándalo político, al punto que el presidente Néstor Kirchner y el ministro de Defensa, José Pampuro, relevaron al jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Carlos Rohde, y de Beltrame.

Además, se disolvió la Policía Aeronáutica Nacional (PAN) y se creó la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

En el debate, que comenzó la semana pasada, están siendo juzgados Walter Beltrame, ex encargado de atención a pasajeros frecuentes; Claudio Baudino, ex supervisor de tráfico en Ezeiza y Ariel Tamburrini, ex jefe de base en Madrid, quienes ayer se negaron a declarar.

El único que declaró por ahora es Fernando Arriete, ex gerente de ventas, quien acusó a los antiguos directivos de SW, Juan y Cristian Maggio, de haber montado un "complot" en su contra para involucrarlo en la causa.

Fuente: Télam