Karen Klein (22), la joven acusada de parricidio junto a su hermanastro y pareja, continuará detenida porque la Justicia rechazó un pedido de excarcelación que había presentado su defensa al entender que existe “peligro de fuga”.
El juez de Garantías Nº 6 de San Isidro, Nicolás Ceballos, dispuso el miércoles pasado que Karen continúe detenida. Actualmente está alojada en la comisaría 7ª de Pilar, pero podría ser trasladada a una unidad penitenciaria. “El jueves presentamos la apelación y ahora hay que esperar a que se sortee el Tribunal de Apelaciones de San Isidro que debe resolver”, dijo a PERFIL el abogado defensor de la acusada, Rómulo Miño.
Karen está detenida desde el 13 de septiembre pasado, cuando la Policía allanó la denominada “casa del horror” y encontró restos óseos calcinados. “Cuando llegó la Policía (Leandro) se puso como loco. Nos dijo que nos quedáramos tranquilos, que no iba a pasar nada. Yo me puse muy nerviosa, no sabía si pedir ayuda o no, no sabía si él tenía el arma encima y le iba a agarrar un ataque e iba a empezar a los tiros, entonces me quedé callada. No sabía cómo defenderme, no sabía qué hacer para que me creyeran que yo no había hecho nada”, recordó la acusada en una entrevista que PERFIL publicó en exclusiva en la edición anterior. “Sólo quiero que se sepa la verdad y se compruebe mi inocencia. Espero que él se arrepienta y confiese lo que hizo”, argumentó.
El caso. Karen y su pareja, Leandro Acosta (25), están detenidos, acusados de matar, descuartizar e incinerar a Ricardo Klein –padre de la joven– y Miryam Kowalczuk –madre del joven–.
Karen aseguró que “no mató” a las víctimas y que su “único error” fue no haber denunciado a su novio. Según la chica, Acosta les disparó un tiro a su padrastro y tres a su madre, y él se encargó de deshacerse de los cuerpos. “Mi único error fue no haberlo denunciado y es un error que lo voy a pagar el resto de mi vida”, se lamenta la joven y argumenta que no lo hizo porque “me amenazaba diciendo que si yo decía algo, me iba a matar”. n
