Simulacro de fusilamiento a una familia en Boedo

Un comerciante de 63 años, su esposa y la hija de ambos, una adolescente de 17, fueron brutalmente golpeados por tres delincuentes que robaron dinero y desvalijaron la casa de la familia en el barrio porteño de Boedo, donde los sometieron a un simulacro de fusilamiento.

El jefe de familia, José Miguel Danada, dijo hoy que los desconocidos irrumpieron pasadas las 19 del sábado en su comercio de venta de cristales para automóviles, situado debajo de su vivienda de la avenida La Plata 1794, cuando bajaba la persiana del local.

Los hombres, que portaban sendas armas de fuego, lo encañonaron, lo golpearon con patadas y trompadas, y lo obligaron a entregar la recaudación de la jornada, para exigirle luego que se dirigiera a su casa.

Tras media hora de amenazas para que el hombre revelara el lugar en el que tenía ahorros, llegó la hija del comerciante, a la que los asaltantes le exigieron la entrega de dinero y su aparato de telefonía celular. "Tiraron a la nena al suelo y, mientras uno gatillaba en falso contra mi hija, otro tomaba un cable y me decía que me iba a picanear", relató el hombre. A la hora, arribó la esposa de Danada, a quien también atacaron los delincuentes.

El comerciante entregó una suma no precisada de dinero y los agresores tomaron luego aparatos de telefonía celular, productos informáticos y otros objetos, para huir a las 21.30 sin dejar rastros.

"Supongo que escaparon en un auto conducido por uno que hacía de campana, porque, cuando mi hija subía durante el tiempo en el que estuvieron en mi casa, alguien llamó a uno de los celulares de los delincuentes para avisarle que se acercaba la nena", concluyó Danada.

Fuente: DyN