Susan Murray, la amiga de María Marta García Belsunce, sostuvo hoy que ahora sí "hay una gran posibilidad" para que la Justicia demuestre si Irene Hurtig, media hermana de la socióloga asesinada, y su marido, Guillermo Bártoli, estuvieron con el viudo Carlos Carrascosa en el momento del crimen. No obstante, duda que se pueda llegar a determinar fehacientemente los motivos del asesinato.
Luego del pedido de la Fiscalía para detener a Hurtig, Murray afirmó que ahora "la Justicia humana está trabajando para darle paz" a María Marta García Belsunce.
"Lo que sí no sé es si alguna vez vamos a saber el motivo de por qué la mataron, salvo que alguno de los involucrados lo diga -opinó-. María Marta recibió una paliza tremenda, la golpearon brutalmente y le vaciaron el cargador (del arma) en la cabeza. Qué puede desatar una violencia tan fuerte, a mí me sobrepasa".
Murray había enfrentado un juicio penal y civil que le había iniciado Hurtig por haber deslizado en una entrevista que la hermana de la víctima podría haber estado involucrada en el crimen.
Hace sólo unas semanas la Corte Suprema revocó una indemnización que se había resuelto en favor de Hurtig, al pedirle a los jueces que consideraran las sospechas sobre la mujer.
Hoy, en declaraciones periodísticas, la ex titular de la agrupación Missing Children, que trabajaba con María Marta, afirmó que "hay una gran posibilidad de que a Bártoli le pase lo mismo" que lo que le ocurrió a Carrascosa en el primer juicio, condenado a cadena perpetua en 2009.
También señaló que llegó el momento de demostrar si era Irene la mujer que aparece hablando en la grabación en la que Carrascosa llama pidiendo una ambulancia para María Marta.
La voz. Una de las pruebas que incriminan a Hurtig es la grabación telefónica registrada cuando la familia llamó al servicio de emergencias. El entonces fiscal Diego Molina Pico estaba convencido de que Hurtig era la mujer que lloraba de fondo en la grabación del llamado que hizo Carrascosa para pedir una ambulancia.
"Vamos María!", se escuchó decir luego de un peritaje de voz que hizo la Gendarmería y que se ventiló en el juicio oral en donde fue acusado el viudo.
Sin embargo, cuando declaró el 25 de abril de 2007 ante los jueces del Tribunal Oral 6 de San Isidro, Hurtig rechazó las acusaciones por el homicidio y acusó al fiscal Molina Pico por supuestamente ensañarse con ella.
Según su relato, aquel domingo 27 de octubre de 2002, día del crimen, había ido a almorzar al country "Lagartos" con una amiga y cuando regresó a su casa, en "Carmel", se fue directo a dormir porque no se sentía bien.
En su casa estaban su marido (Bártoli), Carrascosa, dos vecinos y sus hijos viendo un partido de fútbol. También estaba María Marta, quien le avisó que se iba porque llegaba la masajista.
De acuerdo a sus palabras, recién volvió a ver a María Marta tirada en el piso. Fue corriendo hasta su casa cuando Carrascosa la llamó avisándole que su esposa había tenido un accidente.