Seis hombres, armados y con las caras cubiertas, irrumpieron en una vivienda de Villa Astolfil, a la altura del kilómetro 7 de la ruta 25, en el partido bonaerense de Pilar, cerca de las cinco de la mañana.
Los asaltantes tenían el dato de que allí había una cocina de cocaína, pero en realidad se trataba de la quinta donde viven Ricardo Coronel (44 años), su esposa Mercedes Pajón (48), su hijo de 17 años y un sobrino. La familia, que se dedica al cultivo de verduras, estaba durmiendo.
Los ladrones redujeron a los cuatro miembros de la familia y empezaron a preguntar por la supuesta cocina de cocaína, y a reclamar el dinero y la droga. Las víctimas intentaron explicarles que estaban equivocados, pero no les creyeron: los asaltantes golpearon primero a Coronel y luego a Pajón, mientras los amenazaban de muerte.
Al no obtener las respuestas que buscaban, los malvivientes luego se dedicaron a quemar a los miembros de la familia con una plancha caliente, y les produjeron cortes superficiales con un cuchillo al hijo de la pareja. Después de casi media hora, los ladrones se rindieron y huyeron tras robar algo de dinero.
La familia luego dio aviso a la policía, que acudió a su domicilio y los ayudó a trasladarse al hospital de Pilar, donde quedaron internados fuera de peligro, informaron fuentes judiciales a la agencia DyN. El caso quedó caratulado como "robo calificado, en poblado y en banda y lesiones" y es investigado por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de turno del Departamento Judicial Pilar.
