Matías Messi (35) gambeteó la cárcel y ahora cumple arresto domiciliario en su Rosario natal, luego de abandonar el sanatorio donde pasó once días en terapia intensiva. Su abogado defensor logró que al hermano del jugador del Barcelona le otorgaran ese beneficio debido a su estado de salud. El letrado reparte su tiempo entre los Messi y la defensa de un integrante de la banda narco de Los Monos.
El lunes pasado el hermano mayor de Lionel Messi recibió el alta médica y el juez preparatorio Andrés Donnola determinó que cumpla la prisión preventiva que pesa sobre él en su domicilio. Además ordenó que dos veces por semana personal policial de civil se haga presente en la propiedad.
Ignacio Carbone es uno de los dos letrados que encabeza la defensa del hermano del 10 de la selección argentina. El otro es Froilán Ravena.
El abogado reparte su tiempo entre los Messi y la defensa de Andrés “Gitano” Fernández, sindicado como uno de los sicarios de la narcobanda Los Monos.
El Gitano –junto a los presuntos cabecillas de la banda y una decena de ex policías– está siendo juzgado desde el 21 de noviembre en los tribunales rosarinos.
Esta no es la primera vez que Los Monos y Matías Messi tienen algún tipo de vinculación. Hace unos años se conoció una foto del hermano mayor de la Pulga rodeado de miembros de la presunta banda narco más popular de Rosario.
Allí aparecía Ramón “Monchi” Machuca, sindicado como uno de los líderes de la organización delictiva, y Mariano Salomón, acusado de ser uno de los lavadores del dinero de la banda.
Carbone, en otros tiempos, participó en otras causas resonantes. Defendió al ex líder de la barra de Newell’s Diego “Panadero” Ochoa (condenado a 11 años de prisión por ordenar matar a su antecesor, Pimpi Caminos), a Mauricio Palavecino, encontrado culpable del asesinato de tres militantes sociales en la causa conocida como “el triple crimen de Villa Moreno” y a los patovicas César Ampuero y José Luis Carlino, acusados de participar del crimen de un jardinero municipal. A estos les dictaron el año pasado la falta de mérito, aunque sigue n siendo investigados en la causa.
Con domiciliaria. El 23 de diciembre se vence la prisión preventiva que se le dictó a Matías por tenencia de arma de guerra, tras encontrarle un revólver en la lancha con la que se accidentó en la madrugada del 30 de noviembre pasado. Pero desde el último lunes cumple el arresto en su casa. Su estado de salud fue clave para alcanzar el beneficio.
“La decisión se debe a un informe del médico forense, basado en la historia clínica. Su estado de salud es delicado y por eso se aconseja una prisión domiciliaria porque necesita condiciones de asepsia, con una dieta especial, ya que no puede ingerir alimentos sólidos”, informó el fiscal Lucas Altare.
Messi fue operado del maxilar inferior y del paladar, entre otras heridas faciales sufridas en un accidente con su lancha en el río Paraná, después de que apareció herido gravemente en la cara y a la deriva frente al Club de Pescadores de Fighiera, situado a 38 kilómetros al sur de Rosario. Luego, en el interior de la lancha se encontró el arma no registrada por la que se inició esta causa.
El padre de Matías, Jorge, salió de garante para que su hijo cumpliera la prisión preventiva en un domicilio de la familia. Todo indicaría que el arresto se está haciendo efectivo en la casa particular del joven de 35 años en el barrio rosarino de Las Heras. Esa propiedad había sido baleada en 2011. Seis tiros quedaron incrustados en el frente de la casa.
Este no es el único antecedente ligado a lo policial que tiene el hermano de Messi. Hace dos años, Matías intentó evadir un control policial en la zona sur de Rosario y terminó detenido. Personal de Gendarmería que entonces hacía el operativo vehicular encontró en la guantera del Audi A5 una pistola calibre 22. Por este caso tuvo que cumplir una probation en un club de fútbol barrial. En 2008 fue arrestado en 1º de Mayo y boulevard Uriburu.
A pocos metros del lugar, la policía encontró un arma. En esa causa se le dictó la falta de mérito.
Aún no se sabe qué pasó en la lancha donde se accidentó Matías. Según informó la familia Messi en un comunicado de prensa tras hacerse mediática la noticia, el joven chocó contra un banco de arena y eso produjo el accidente. Matías aún no declaró ante la Justicia y se esperan los resultados de una batería de medidas solicitada por los investigadores.
Mientras estaba internado, Matías fue imputado por portación de arma de guerra en calidad de autor. Esta figura prevé una pena que va de tres a ocho años de prisión.
Aguardan peritajes claves
Todavía no están los resultados de las pericias ordenadas por los fiscales de la unidad especializada en delitos informáticos e investigaciones complejas Lucas Altare y Matías Ocariz en la causa que tiene como protagonista a Matías Messi.
Los funcionarios solicitaron examinar el patrón genético de las muestras de sangre halladas en la lancha, realizar el estudio de dermotest al imputado y coordinar pericia sobre la lancha en relación con los daños que hubieran podido producirse en el supuesto choque con un banco de arena.
“Los estudios de ADN podrían demorar entre dos y tres meses”, explicaron a PERFIL fuentes del caso. Para esta semana estaba programada una pericia mecánica, pero se postergó. Estos resultados aportarán claridad a lo que sucedió.
