Uno de los presuntos barras bravas de River prófugo de la Justicia le anunció al juez que dispuso su detención que permanecerá evadido de la Justicia por lo menos hasta fin de mes. Además, se quejó por su situación y consideró que no está imputado por el crimen de Gonzalo Acro, asesinado en agosto en el marco de la disputa interna de Los Borrachos del Tablón.
Eduardo Monzón del Valle presentó el viernes pasado ante el juez Luis Rodríguez un escrito en el que explicó que "cuando se tejieron sospechas sobre una presunta participación" suya en el crimen de Acro, se presentó ante el juez para "colaborar con la presente causa".
"Nunca fui llamado. Ahora tengo supuestamente una orden de detención sin estar rebelde”, afirmó el supuesto barra de River, que seguirá prófugo hasta tanto su abogado vuelva de los Estados Unidos. "Tampoco solicitaré una exención de prisión por entender que no me encuentro imputado de delito alguno", dijo.
“No me he presentado porque el magistrado, si hubiera tenido alguna sospecha, debió citarme a declaración indagatoria, pues la captura se pidió a los prófugos, rebeldes o que no se hayan acercado a la Justicia”, se defendió Monzón.
Del Valle aseguró que su vinculación con el crimen de Acro era sólo “una versión de un canal de televisión" y embistió contra el juzgado por lo que consideró una violación a “todos los principios y garantías constitucionales de una persona que al considerarla un noticiero sospechoso se presentó y ofreció declarar”.
“Eso me costó la separación de mi mujer, que me echen del trabajo y recibir amenazas de personas que ni siquiera conozco", afirmó el hincha.
Debora Roldán, ex pareja de Del Valle, también presentó un escrito ante el juez en el que denunció que su domicilio fue allanado y le fueron secuestrados elementos de trabajo y "escritos judiciales".
Roldán es secretaria del abogado de Del Valle, Andrés Rabinovich, y en su casa guardaba cédulas judiciales vinculadas con otros expedientes.
Fuente: DyN