A horas de haber recuperado su libertad tras haber sido sindicado por la justicia de Río Cuarto como el siniestro asesino de Nora Dalmasso, el pintor Gastón Zárate encabezó esta tarde el segundo "perejilazo" que se llevó a cabo en la ciudad cordobesa en reclamo de una investigacion "seria" del homicidio en el country Villa Golf, ocurrido hace casi ochenta días.
En andas de a ratos, Zárate guió a unos dos mil riocuartenses por los lugares neurálgicos del caso Dalmasso: la comisaría, la sede judicial local, la casa de Daniel Lacase –amigo y ex abogado del viudo Marcelo Macarrón– y, por último, la sede de la intendencia, donde algunos exigieron una urgente intervención a la justicia de la ciudad.
A diferencia del perejilazo de ayer, esta vez se sumaron a la protesta las ya clásicas cacerolas, lo que dio un tinte más politizado a la marcha. Con sus cánticos, los manifestantes no sólo pidieron "que se dejen de buscar perejiles" para endilgarles el homicidio sino, ademas, reclamaron la renuncia de jefes policiales, funcionarios públicos y hasta el gobernador José Manuel De la Sota.
“Gastón, querido, el pueblo está contigo”, fue uno de los cánticos entonados por los cerca de dos mil manifestantes que se congregaron poco después de las 19 en la plaza principal de la ciudad para reiterar su apoyo al albañil, quien lucía una remera azul y un jean.
“Es un chico inocente que fue encarcelado por pobre, para evitar la detención de sospechosos de alto nivel”, sostuvo uno de los riocuartenses que participó de la movilización. Por su parte, otro de los pobladores consideró que “los poderosos quieren tapar todo con plata para proteger a personas involucradas en la política”.
Los manifestantes reiteraron así que Zárate fue incriminado con pruebas falsas en el crimen de Dalmasso ocurrido el 25 de noviembre pasado en su vivienda de un barrio privado. Con todo, el joven acusado fue liberado este mediodía por "inexistencia del presupuesto básico del instituto de la detención".
Fuente: DyN