"Esto puede ser un nuevo caso Reposo", afirmó ayer el senador radical Ernesto Sanz sobre el anuncio de la postulación de Roberto Carlés para ocupar un lugar en la Corte Suprema de Justicia de la Nación. La comparación del precandidato presidencial ya tiene un punto de apoyo: como el hombre que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner propuso en 2012 como Procurador General de la Nación, Carlés está acusado de "inflar" su curriculum.
Es que el jurista, discípulo de Eugenio Raúl Zaffaroni, asegura en su resumen haber sido asesor del Colegio Público de Abogados en 2004. Pero desde la propia entidad desmintieron que haya sido así.
Jorge Rizzo, expresidente del organismo en tres períodos y actual vocero, sostuvo que "no es cierto que Carlés haya sido asesor jurídico de esta institución en enero de 2004, como dice en sus antecedentes".
El Colegio Público de Abogados, que acaba de recibir la notificación oficial para opinar sobre la candidatura del jurista, anunció también que impugnarán su pliego a raíz de esta circunstancia.
Según el organismo, Carlés apenas fue un aspirante a procurador o cadete, y estuvo durante 15 días recibiendo asesoramiento del personal de la entidad. Luego nunca más se presentó.
José Roberto López, presidente de la entidad, señaló ayer que la designación cayó por sorpresa y manifestó que a título personal "Carlés es brillante, pero le falta algo para poder llegar al máximo tribunal: le falta experiencia".
