Desde la Secretaría de Transporte se convirtió en uno de los funcionarios kirchneristas que más poder acumuló. El manejo de los multimillonarios subsidios por el transporte le trajo más de un problema e hizo que lo acusaran de enriquecimiento ilícito. Sin embargo, Ricardo Jaime asegura, a través de su declaración jurada, que su paso por la función pública lo empobreció.
El ex funcionario K explica que en los últimos seis años perdió casi el 70% de su patrimonio, y que, según él, hoy no llega a los 80.000 pesos. “Cuando asumió, en 2003, Jaime informó que tenía bienes por 266.700 pesos; esta semana, en su declaración jurada de baja de la función pública, declaró propiedades por 118.624 pesos y una deuda de 41.034, es decir, un patrimonio neto de 77.590 pesos”, publicó hoy el diario La Nación.
Según el matutino, una moto y un inmueble de 81 m2 en Caleta Olivia, Santa Cruz, son lo único que dijo tener. Sin embargo, el juez federal Norberto Oyarbide cree que Jaime podría ser el dueño de varios bienes no declarados: un avión de cuatro millones de dólares que utiliza como propio; un yate; cinco inmuebles en la provincia de Córdoba (dos en el country Cuatro Hojas), uno en Boulogne, cuatro en Santa Cruz y uno en la ciudad de Buenos Aires, ubicado sobre la Avenida del Libertador y Cerrito.
El ex Secretario de Transporte renunció a la Secretaría de Transporte el 1° de julio pasado. Cuando se fue acumulaba una treintena de denuncias judiciales en su contra.