El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, negó hoy que haya sido un "golpe" para el Frente para la Victoria el resultado en las PASO de la Ciudad de Buenos Aires, donde el candidato Mariano Recalde quedó en tercer lugar en la suma de votos de las fuerzas, pero admitió que fue "una elección esquiva".
"Hicimos una proyección con una encuesta de boca de urna que estaba equivocada", analizó en diálogo con la prensa.
“Nosotros aspirábamos a salir primeros, no a salir segundos", manifestó el funcionario, quien anoche había calificado de "fenomenal" el desempeño del kirchnerismo.
En su conferencia de prensa habitual antes de ingresar a la Casa Rosada, Fernández atribuyó a las "bocas de urna" que ayer el kirchnerismo celebrara un segundo lugar que luego no fue tal y, sobre el resultado, reconoció: "Golpe no, es una elección esquiva y difícil para nosotros".
El Frente para la Victoria quedó en tercer lugar, el cual representó un 18.73 por ciento de los votos, lejos de ECO y del PRO.