“Sr. Canciller, no quiero pensar que usted está buscando con todas estas cuestiones motivos para no venir, o Néstor Kirchner no le da permiso...”. Eso le dijo el periodista Alfredo Leuco a Héctor Timerman mientras intercambiaban mails y llamados telefónicos en los últimos días, con vistas al candente debate que iban a tener esta noche en “Le doy mi palabra”, el programa de Leuco en Canal 26.
El motivo del debate era simple: iban a poner sobre la mesa las graves acusaciones que cruzaron de uno y otro lado. El canciller K fue el que abrió el fuego disparando en Twitter que Leuco le pidió pauta para un programa, hace unos años, a cambio de hablar "a favor" de Néstor Kirchner.
Por supuesto la respuesta del periodista fue tajante, calificando de "infamia" tal afirmación y recordando la polémica actuación de Timerman durante la dictadura, cuando ocupó la dirección del diario "La Tarde", de clara postura pro golpista.
"Alfredo, coincido en que la conversación tiene que ser en un marco democrático e igualitario. Muchos periodistas me han pedido entrevistas para un análisis de este tipo, sin embargo, considero que una charla contigo será más provechosa para ambos y para los argentinos que estén interesados en un intercambio de ideas sobre nuestra política exterior y otros temas que me ocupan. En estas semanas han ocurrido hechos trascendentes que requieren tomarnos el tiempo para exponerlos en profundidad. Con este espíritu me gustaría que el formato fuese un diálogo sincero en donde el fondo sea más importante que las formas. Te agradecería entonces si dicho diálogo tuviese lugar a lo largo de la hora de tu programa. Yo no voy a llevar documentación alguna ni papeles para mostrar en cámara, para lograr así un de diálogo franco, espontáneo y respetuoso. Saludos, Héctor", le escribió Timerman a Leuco cuando este advirtió que llevaría al debate "material escrito y fílmico" para demostrar "todas las mentiras" que le dedicaron en las últimas semanas el propio canciller y Horacio Verbitsky.
En Twitter, Timerman justificó su ausencia al debate señalando “yo no tengo archivos, ni videos, ni equipo de producción. Leuco quiere un show”. Y el periodista, entonces sin contraparte, dedicó todo su espacio a rebatir las acusaciones de Timerman. Negó, por supuesto, haber pedido pauta a cambio de apoyo K y desafió al canciller a probar, en Tribunales, esa afirmación, "que en los últimos días ya ha empezado lentamente a aliviar", sostuvo.
"No me gusta tener que poner sobre la mesa temas de mi vida personal", dijo Leuco esta noche a sus televidentes, "pero han sido tan graves estas acusaciones, que dañan mi integridad y me causan tal daño que por eso debo ocuparme de defenderme. Invierten la carga de la prueba, obligándome a probar que lo que dicen es mentira".
Leuco negó ser "un hombre de fortuna", como también le dedicó Timerman, dijo que tiene un Astra modelo 2006 y vive en un departamento de 104 mil pesos, contrarestando esa situación con la millonaria declaración jurada que Timerman presentó ante la Oficina Anticorrupción, que lo ubica como el segundo integrante del Gabinete K más adinerado.
"Si tengo una empresa, si usted Canciller prueba que yo tengo una empresa, se la regalo", dijo Leuco, recordando luego que en la revista Noticias Timerman era partidario de Elisa Carrió. Mostró la nota firmada por el canciller titulada "Por qué voto a Carrió" y hasta leyó párrafos, en los que Timerman sostenía que Lilita y López Murphy "han dado capacidad de Gobierno".
Leuco señaló que Timerman "solía llevarle flores y bombones a Carrió a su casa" y que justamente estaba allí cuando sonó su teléfono y era Alberto Fernández convocándolo a una reunión en Casa de Gobierno, donde le ofrecieron un programa en Canal 7 y pauta para la revista Debate. Fue en ese momento, disparó Leuco, que Timerman se volcó al kirchnerismo. Precisó además que, ya en Canal 7, Timerman llegó incluso a discutir con Kirchner para que le permitiera llevar a Carrió al canal oficial "para mostrar que somos pluralistas", situación que el ex Presidente, por supuesto, nunca aceptó.
"Tengo el testimonio de una ex diputada del ARI para atestiguar esto", aseguró Leuco, que dio paso luego a intervenciones de Jorge Lanata y Nelson Castro contando sus desvinculaciones de América y Radio del Plata por presiones K. Leuco mencionó a Julio Nudler como un hombre que "anticipó lo que se venía", en relación a las presiones a la prensa, con los Kirchner en el poder y mencionó el caso de Pepe Eliaschev, despedido de Radio Nacional por el tono crítico de algunas de sus opiniones. A propósito de Pepe, recordó que el cordobés Luis Juez le contó que fue testigo de cuando Alberto Fernández recibió la llamada de Kirchner en la que le ordenaba echar a Eliaschev de la radio oficial.
"Estoy harto de estas cosas que estoy contando", señaló Leuco, enfatizando que "hay un periodismo amanuense que no habla de tierras fiscales compradas a precio vil y vendidas en millones, lo que ha pasado con Ricardo Jaime, los aportes de campaña hechos al kirchnerismo por empresas vinculadas con la mafia de los medicamentos, etc".
Asimismo recordó que le ganó el juicio a América TV probando que tenía con ese canal una relación de dependencia regida por el convenio del periodista "y no de contratos o comercial, como descaradamente le dijo Héctor Timerman a Nelson Castro", indicó.
El bloque de cierre fue para rebatir otra de las acusaciones de Timerman (y Verbitskty), la de si tenía "verguenza de ser judío" y por eso apocopaba su apellido. Fue entonces cuando Leuco pasó fragmentos del programa "Génesis", envío de tono religioso auspiciado en su momento por la AMIA y en el que Leuco llegó a contar su propio Bat Mitzvah. Incluso recordó que el propio Verbitsky le agradeció que haya aportado como testigo a un juicio que tenía con Menem, donde compareció obviamente con su apellido Leucovich, y hasta mencionó distinciones a personalidades de orígen judío entregadas en su momento. "Figurábamos en el rubro periodistas, entres otros, Verbitsky y yo, en mi caso fui a recibirla con toda mi familia, Verbitsky no fue, mandó a su madre, que me saludó amablemente y me dijo que escuchaba todos los días mi programa". Contó que cuando dos camiones con soldados fueron a buscarlo a su casa tras el golpe de 1976, se mudó a Buenos Aires y acortó su apellido,"para dificultar mi búsqueda y esconderme en la gran ciudad... mientras yo hacía eso, Timerman se reunía con Videla y dirigía el diario La Tarde", concluyó.