El secretario general de la Naciones Unidas, Ban Ki-moon, aseguró que "la era de la impunidad ha muerto" en materia de Derechos Humanos y que "ha llegado la hora de la rendición de cuentas".
"Aquí en Argentina y en todo el mundo puedo decir con seguridad que la era de la impunidad ha muerto y ha llegado la hora de la rendición de cuentas", aseguró el secretario de la ONU, al hablar en el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, ubicado en la ESMA.
Ban Ki-moon subrayó que "ya no hay lugar seguro en el mundo para los que violaron los Derechos Humanos" durante un discurso en que también expresó que "tarde o temprano llegaremos a la verdad".
El diplomático recorrió el antiguo casino de oficiales de la ESMA, el principal centro de detención, tortura, maternidad clandestina y lugar de donde partían los vuelos de la muerte.
Fue "una experiencia muy movilizante y triste estar en esos lugares donde miles de personas estuvieron detenidas, torturadas y luego desaparecidas sin dejar mensajes ni rastros a sus familiares" y luego declaró que estaba "conmovido: una cosa es leer las historias y otra verlos con los propios ojos".
El diplomático surcoreano felicitó "por tanto coraje en la lucha incluso en los tiempos más sombríos" a los organismos defensores de derechos humanos, y se refirió a las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo.
"Quiero alentar a las autoridades para que sigan alentando para que sigan investigando, enjuiciando y castigando a los responsables" y pidió que "se debe proteger a los testigos, así como a los jueces y los fiscales".