La prefectura volvió a hacer un rastrillaje sobre el Río Chubut por tercera vez en busca de Santiago Maldonado pero en esta ocasión con un equipo mucho más especializado: llevaron perros entrenados para encontrar cadáveres en el agua.
Estos perros entrenados viajan en un bote y dan señales en el momento que perciben algún resto humano o animal por el dióxido de carbono, para que los propios agentes de búsqueda se sumerjan a buscar en esa zona. Esa fue la diferencia con los otros dos rastrillajes anteriores donde se buscó al joven artesano por debajo de los ríos.
Según trascendió, la fiscal federal de Esquel, Silvina Ávila, fue asesorada por el Equipo Argentino de Antropología Forense para pedir esta pesquisa. Se trata de un grupo especializado que llegó a la Justicia a través del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).
En las primeras versiones que circulan, el cuerpo fue hallado enganchado entre varias ramas de las que abundan en esa zona, donde había una hondonada, típica de los cauces en los que desemboca agua de deshielo.
Por orden del juez, el cuerpo no se puede tocar ni mover hasta que llegue el perito de la familia Maldonado, Alejandro Inchaurregui, quien se espera que llegue a las 21 para comenzar a analizar la identidad del cuerpo encontrado a unos 1500 metros de la guardia de la comunidad Mapuche en Pu Lof.
De Santiago Maldonado no se sabe nada desde el 1 de agosto, luego de un operativo de represión de la Gendarmería Nacional contra la comunidad Mapuche, en la misma zona donde encontraron el cuerpo este martes.