El ministro de Seguridad bonaerense, que viajaba junto a la procuradora
María Falbo, agradeció
"a la ayuda de Dios y la pericia de los pilotos".
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Cedoc
El ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, y la procuradora provincial María del Carmen Falbo sufrieron heridas leves ayer, cuando el avión en que iban a viajar hacia La Plata despegaba en la zona de Mercedes y se despistó. Aunque en un primer momento se temió por la vida de los funcionarios, tanto el gobernador Daniel Scioli como los médicos que atendieron a las víctimas confirmaron enseguida que Casal, Falbo y los pilotos estaban fuera de peligro.
"La sacamos barata", dijo Casal un rato después, agradeciendo "la ayuda de Dios y la pericia de los pilotos". El funcionario, que sufrió golpes en un hombro, es el responsable de combatir el delito de la provincia desde hace tres meses, cuando Carlos Stornelli dejó el Gobierno bonaerense y se unificó Justicia con Seguridad. Es por eso que en las últimas semanas tuvo una gran exposición pública por la gran cantidad de asaltos, salideras y crímenes ocurridos en La Plata y el conurbano. Falbo, en tanto, es la jefa de los fiscales bonaerenses.
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Al parecer, el accidente se debió en un desnivel del terreno de la pista del aeródromo de Mercedes, cuando las ruedas de la nave se trabaron y salió despedida sin control, hasta terminar en medio de una arboleda y pastizal.
Casal elogió las condiciones del avión, que utilizaron para cumplir diligencias oficiales: "La aeronave estaba puesta en funciones recién, reparada a nuevo". Contó que habían volado a Lobería, de allí a Mercedes y luego a La Plata. El ministro destacó que "podría haber sido peor; gracias a Dios y a la pericia de los pilotos la sacamos barata. Ha sido una nueva oportunidad que tuvimos para seguir trabajando".
