Una vez más, la situación por los contagios de coronavirus en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense volverá a ser esta semana el foco de las miradas ante posibles nuevas restricciones. El DNU presidencial que suspendió las clases presenciales y aumentó el horario prohibido para circular por la noche vence el viernes 30 de abril y si bien no se esperan novedades para los próximos días, el presidente Alberto Fernández y el gobernador Axel Kicillof mantuvieron una reunión el viernes por la noche para analizar el escenario del sistema sanitario.
La principal preocupación es la ocupación de las camas de terapia intensiva a ambos lados de la General Paz y la posibilidad de incrementar ese capacidad, en simultáneo al avance del operativo de vacunación.
De acuerdo a un informe que maneja el gobierno provincial, en la etapa prepandemia se mantuvo la lógica de centro-periferia donde la centralización hace que se desplacen desde la periferia hacia el centro gran parte de la población para diversas actividades, entre ellas la atención de salud. Pero ahora esa lógica parece comenzar a revertirse ante la tensión del sistema de salud porteño, sobre todo del sistema privado y lleva incluso a que ciudadanos porteños deban ser derivados al Conurbano ante la falta de camas.
“Si la CABA, ciudad cabecera del Área Metropolitana, no da abasto para responder a las demandas de sus propios ciudadanos expulsandolos al conurbano, el colapso de su sistema es inminente, presionando aún más el sistema de atención del resto del AMBA, que recibe derivaciones de ciudadanos porteños”, indica el informe, que anticipa un “colapso” en el distrito.
Las cifras actualizadas del Gobierno de la Ciudad indican que se encuentran ocupadas 79,9% de las camas disponibles para casos graves, ya que de un total de 450 camas, se encuentran en uso 359. El ministro de Salud, Fernán Quirós, buscó llevar tranquilidad ante la manifiesta preocupación bonaerense y estimó que en los últimos días “se estabilizó la cantidad de casos”. Las explicaciones de Quirós tuvieron además un efecto político tras las acusaciones por irregularidades en la vacunación de los afiliados de PAMI que se intentará encaminar en una nueva reunión entre la Ciudad y el organismo que comanda la camporista Luana Volnovich.
En Provincia, el viceministro de Salud, Nicolás Kreplak, confirmó ayer que ya están “muy cerca” de completar la vacunación de los mayores de 70 y de los mayores de 60 con factores de riesgo, mientras que la Ciudad avanza con la vacunación del grupo de entre 65 y 69 años.
