El resultado electoral también generó repercusiones en el ámbito del Consejo de la Magistratura. Como primer efecto, los empleados del organismo detectaron que el representante del Poder Ejecutivo, Julián Alvarez, ya despegó de la puerta de su oficina el cartel con su nombre.
En lo que muchos interpretaron como una decisión acelerada, el secretario de Justicia ya estaría despidiéndose de un Consejo de la Magistratura que lo tuvo como protagonista en todo el último período, como el líder de las estrategias del kirchnerismo de cara al Poder Judicial.
Esta semana, hubo una reunión de consejeros, pero ninguno de los oficialistas fue. Según trascendió por diversas fuentes, el kirchnerismo buscaría, antes del ballottage, votar un cambio de autoridades para dejar en la Presidencia del organismo –por lo menos durante el primer año del poskirchnerismo– a un consejero afín. Se trataría del representante de los académicos, Jorge Candis.
En la última sesión llamó la atención –y generó chistes– que la actual presidenta Gabriela Vázquez (aliada a los K) y su asesora fueron vestidas de amarillo.
