Cristina defiende las retenciones en pos de la equidad, pero los planes alimentarios estatales son un fracaso

Pese a que la equidad social y el hambre del pueblo suelen ser algunos de los temas que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner trata con vehemencia en sus discursos, la realidad, según una investigación del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec), no está ni cerca del ideal de la mandataria.

Es que, según la organización no gubernamental, los planes alimentarios estatales son un completo fracaso: acentúan las brechas de inequidad, están implementados en medio de una importante falta de coordinación entre los gobiernos nacional, provinciales y municipales y en muchos casos las cajas de comida que se entregan a las familias no cuentan con la cantidad necesaria de nutrientes, por lo que producen obesidad infantil.

El objetivo del Cippec al iniciar el estudio era analizar, tras 25 años de gobiernos democráticos, si los programas alimentarios habían logrado revertir la desigualdad entre las provincias, según consigna el diario La Nación. Para la investigación, la ONG tomó datos de la última Encuesta Nacional de Nutrición y Salud de la Nación.

Desigualdad social, desigualdad territorial. " Las provincias del Norte presentan peores condiciones socioeconómicas, como también nutricionales. En las del Sur los indicadores muestran datos menos alarmantes. Misiones y Corrientes tienen la mayor proporción de menores de seis años con bajo peso, y en Santa Fe y Corrientes están los mayores porcentajes de desnutrición crónica", indica el informe en uno de sus apartados.

Con este panorama, el informe concluyó que las provincias del NEA y del NOA son las que cuentan con los mayores índices de mortalidad infantil en chicos de entre 1 y 14 años, mayores porcentajes de mortalidad materna y una población con necesidades básicas insatisfechas.

Además de la falta de comida, la ONG apuntó a otro grave problema, la obesidad infantil, producto del mal diseño de los planes alimentarios. Es que, según argumenta el análisis, "contrariamente a la creencia popular, los sectores de menores recursos son los más afectados por la obesidad, ya que no pueden acceder a alimentos cuantitativa y cualitativamente adecuados para una correcta nutrición."

"Luego de 25 años de acciones, no se ha logrado generar una articulación aceptable entre los distintos actores que participan en el diseño y la ejecución de dichas políticas", concluye el informe.