Dos días después de haber retomado su actividad oficial, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner viajó a la provincia de Santa Cruz, donde pasará todo el fin de semana junto a su familia.
Tras mantener reuniones con funciones de gobierno, partió a El Calafate acompañada por su hijo Máximo y su nuera Rocío García, después de permanecer un mes en Buenos Aires, donde fue operada de tiroides.
Antes de su viaje, Cristina tuvo encuentros con el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray y con el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, que organiza su agenda.
Por recomendación médica, y con una licencia de 20 días durante el posoperatorio, la primera mandataria no podía alejarse de la ciudad para que los médicos pudieran hacerle un seguimiento.