POLITICA

De Narváez también criticó el discurso del campo

El dirigente de Unión-PRO se sumó a Solá en los cuestionamientos a la Mesa de Enlace. Dijo que fue una posición "agresiva" y que "no es el camino".

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| Cedoc

Poco a poco, las fuertes declaraciones expresadas por distintos integrantes de la Mesa de Enlace, comenzaron a ser criticadas por todo el arco político. Esta vez fue el turno del diputado electo de Unión-Pro Francisco De Narváez, quien dijo que "no es el camino" para construir el diálogo.

"Me parece que no es el camino. Yo no voy a participar de ese tipo de actitudes. Por el contrario, las voy a remarcar como algo equivocado", señaló De Narváez. Sin embargo, el diputado electo volvió a manifestar su respaldo al sector agropecuario al subrayar que no perderá "un centímetro de la firmeza con la cual tenemos que actuar".

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En declaraciones a radio MItre, reproducidas por la agencia DyN, De Narváez se sumó a las críticas expresadas por Felipe Solá, quien ayer señaló que el campo "se pasó de rosca" con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. En ese sentido, hoy el empresario remarcó: "Que nadie crea que haber triunfado en una elección te permite ser triunfalista".

"Ayer se cumplió un mes de la elección y nosotros hemos mantenido una posición cauta", aseveró De Narváez. Y agregó que no está de acuerdo con "decir que yo tengo razón sobre todos y lo único que tienen que hacer es lo que yo pienso", y opinó que las expresiones de la Mesa de Enlace "fueron subidas de tono".

A 24 horas de su encuentro con el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, De Narváez reconoció que es "consciente" de que "parte del voto" que recibió el 28 de junio Unión-Pro fue para "representar las necesidades del campo". Y añadió que "las formas y los procesos son los que hay que tener en una sociedad que tiene que salir del conflicto permanente".

"De ahí a entrar en una posición descalificante, agresiva que lo que en realidad produce es un estado de ánimo de división y no de coherencia, me parece que no es el camino", aseguró De Narváez, quien, al igual que otros sectores políticos, no quiso quedar vinculado a las fuertes expresiones rurales.