El anuncio de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner referido a la cancelación de la deuda con el Club de París, encontró en Casa Rosada a ministros y gobernadores con empresarios y sindicalistas aplaudiendo la decisión.
No obstante, según especialistas, la determinación del Ejecutivo tiene aristas para desasnar. "Me parece un verdadero disparate. Con esto Argentina pasa a la historia como un pagador formidable haciéndose cargo de deudas ilegítimas al igual que con el FMI", remarca Claudio Lozano, economista y diputado nacional. "En el caso del Club radica la ilegitimidad en que la mitad de la deuda procede de los finales de la dictadura donde se endeudó a las empresas estatales para garantizar la salida de las rentas financieras en divisas de los grandes capitales locales y extranjeros", agrega.
Según Lozano, la estrategia del gobierno se repite. "Esa deuda ilegítima debió ser investigada antes de asumida y pagaba".
El economista Claudio Katz opina que ya "se venía negociando algo así pero no deja de ser sorpresivo porque van a pagar con reservas".
Consultado por Perfil.com, Katz destacó las "prioridades" de la gestión de Cristina Fernández en materia económica. "El dinero que está en las reservas debería estar destinado a la salud, la educación. Es la realidad del doble discurso de este gobierno. Primero el país y después los banqueros. Con el paso del tiempo es al revés. Este es un pago completamente innecesaria, parte de la famosa deuda que debe ser investigada", resaltó.
Tanto Lozano como Katz coinciden al momento de abordar los dichos de la presidenta sobre el crecimiento industrial y las supuestas diez mil empresas creadas en el período 2003-2007. El primero señala que es una "consecuencia obvia de una caída de veinte puntos y un período de suba". El segundo, en tanto, lo reseña: "Lo más complicado es hablar del presente. Ha caído la inversión y el empleo. Entonces el panorama rosa que se pintaba durante todo ese período no es el de 2008".
Aldo Ferrer, del Grupo Fénix, más cercano al gobierno, defiende la iniciativa impulsada. "Una buena medida porque ratifica la fortaleza financiera del país, que cumple con los pasivos". Consultado si el pago no podría traer problemas por el uso de las reservas del Central, Ferrer afirmó que no, porque "disminuye un activo, pero también disminuye un pasivo, es parecido a lo que pasó con el pago al FMI, como tenemos una buena política cambiaria, probablemente se reponga lo que se usó el año que viene, o antes.
El economista Daniel Marx señaló a Perfil.com que la determinación de pagar la deuda con el Club de Paris no va a modificar la situación macroeconómica. "Tal vez baja la tasa de interés" ante el pedido de financiamiento internacional, reconoció el ex funcionario de la Alianza, aunque manifestó que la situación del INDEC "es un tema" a resolver para recuperar la confianza de los inversores.