Parece chiste pero no lo es. En el primer día del boicot iniciado por asociaciones de consumidores para que la gente no compre tomates por la imparable escalada del costo de esa fruta, hoy al mediodía la candidata presidencial oficialista, Cristina Fernández de Kirchner, tuvo oportunidad de degustar dos abundantes platos a base de tomate, la fruta prohibida del INDEC.
El menú del almuerzo que le ofreció hoy la Asociación Empresaria Argentina, a la senadora y a los asistentes al encuentro en el restaurante del Hotel Sheraton de Pilar, comieron de entrada "ensalada capresse" (muzarella de búfala, tomate, albahaca, aceite de oliva extra virgen y pimienta negra).
Antes del primer manjar, se permitió defender los cuestionados índices de inflación del INDEC , ante decenas de empresarios que no ocultaron sus temores por un rebrote inflacionario que dispare los salarios.
La carta distribuida en las mesas del restaurante Don Giovanni del hotel también incluyó de plato principal "Pacífico y gardenia de vegetales" (salmón asado con berenjenas, tomate redondeo y zuccini).
Para la tranquilidad de las asociaciones que exigen que se cobre 3,99 pesos el kilo de tomate y no 18 pesos como el que realmente se cobra en verdulerías y supermercados, el postre no incluyó esa fruta, sino que fue "Frutos patagónicos con bizcocho horneado" (frambuesas, arándanos, cassís moras, reducción de vino y sus jugos, helado artesanal).
Desde la cocina de Don Giovanni dirigida por Guillermo Busquiazo, Chef Ejecutivo del Hotel, confirmaron a perfil.com el menú que almorzó la senadora, pero no supieron decir a cuánto se pagó el kilo de tomate para presentar en las mesas la capresse y la gardenia de vegetales.
Fuente: DyN