Los caminos de la política están llenos de contradicciones, como la que hoy le toca vivir al gobernador kirchnerista del Chaco, Jorge Capitanich, quien alineado con el Gobierno nacional defiende a ultranza la suba a las retenciones móviles a las exportaciones agropecuarias. Sin embargo, he aquí la obscena contracción, cuando era Senador en 2003 presentó un Proyecto de Ley en el que solicitaba la " Eliminación total de las Retenciones a las Exportaciones Agropecuarias".
Así consta en el Proyecto de Ley, rotulado bajo el expediente S-0075/03, archivado en la dirección de publicaciones del la Honorable Cámara de Senadores de la Nación, que hoy dio a conocer el blog Libertas bajo el título "Capitanich, el hipócrita".
En él, haciendo eco de las condiciones económicas pujantes de la economía del país tras la asunción de Néstor Kirchner, Capitanich argumentó que " se hace posible la programada eliminación de las retenciones adicionadas excepcionalmente al sector agropecuario, a medida que se evidencia la dilución del impacto de la extraordinaria transferencia de ingresos operada por efectos de las modificaciones cambiarias, dejando a aquél en posición de afrontar con mayor libertad las perspectivas propias de su actividad, aportando equitativamente al bien común".
La situación en el Chaco es tensa. La mayoría de los productores se siente defraudados por el accionar de Capitanich, quien les prometió soluciones cuando el conflicto atravesaba su primer tramo, allá por finales de marzo, pero después les negó la atención y se alineó de lleno a la postura del Gobierno nacional, como uno de los gobernadores más representativos de la postura oficial.
Ayer, en calidad de vicepresidente primero del PJ, fue el encargado de leer el comunicado del partido en el que se acusó al campo, lisa y llanamente, de buscar un Golpe de Estado para derrocar al Cristina Fernández de Kirchner. Ya había sido virulento su discurso cuando, en el partido de Tres de Febrero, fue uno de los oradores durante la asunción de Néstor Kirchner como presidente del justicialismo.
"Nadie resiste al archivo", reza una conocida frase. Hoy, ha quedado en evidencia que Jorge Capitanich tampoco. En tan sólo cinco años, pasó de pedir la eliminación total de las retenciones al agro a encolumnarse como uno de los soldados oficiales en la defensa de su suba, que ha detonado un conflicto agropecuario sin precedentes en la historia nacional.