La Guardia Civil detuvo al párroco de Borja, Florencio Garcés, por presunto delito económico, ya que lo acusan de haberse quedado con la recaudación correspondiente a Cecilia Giménez, la mujer que se hizo famosa por su particular restauración del Ecce Homo.
El sacerdote de la localidad de Zaragoza fue detenido hoy y quedó a disposición judicial en Tarazona, informaron fuentes de la Delegación del Gobierno de Aragón. Aún no se brindaron más detalles de las condiciones y las causas de la detención.
La parroquia de Borja saltó a la fama en agosto de 2012 cuando Cecilia Giménez, una mujer de 80 años que solía colaborar con la iglesia, decidió restaurar un deteriorado mural de Elías García Martínez, el Ecce Homo.
La pintura quedó accidentalmente arruinada, pero la imagen se convirtió en una sensación irónica en internet y en un atractivo turístico para Borja. Este año Giménez, de 82 años, logró cobrar regalías por su "restauración".
Si bien no se difundieron cifras oficiales, el diario español La Vanguardia calcula que el sacerdote se habría apropiado de unos 200.000 euros.
