El ministro de Justicia, Germán Garavano, aseguró este viernes que "Argentina es uno de los países con mayores niveles de impunidad del mundo", y confirmó que el Gobierno impulsará una reforma del Código Penal y la escala de condenas, sumado a los cambios propuestos en el régimen de responsabilidad juvenil, que incluye una baja de la edad de imputabilidad.
"Cuando uno hace un análisis sobre la cantidad de hechos delictivos que se cometen y las personas que están efectivamente condenadas, el número es menor al uno por ciento", advirtió el ministro y, en tal sentido, denunció que durante el kirchnerismo hubo una visión "más cercana" al victimario que a la víctima.
"Argentina es uno de los países con mayores niveles de impunidad de la región y del mundo", subrayó. En esa línea, consideró: "Hay jueces que trabajan mucho, que le ponen el esfuerzo (para una mejor administración de justicia), y hay otros que tienen a veces miradas muy alejadas del sentido común y de la realidad, donde solo ven al victimario y se olvidan de todo el daño social y de la víctima".
En declaraciones a Radio Mitre, Garavno realizó una renovada crítica a la anterior administración y planteó que "durante muchos años tuvimos desde el gobierno, desde el poder una mirada que iba más cercana en esa dirección y todo esto fue llevando a una situación que hoy estamos tratando de corregir".
En este marco, el titular de la cartera de Justicia confirmó la decisión de la Casa Rosada de motorizar cambios en el Código Penal y la escala de condenas, tras alertar sobre las "incongruencias" que existen entre la aplicación de ese instrumento y la actual jurisprudencia. El funcionario se refirió a las "900 modificaciones que tiene el Código Penal" y que llevan a situaciones llamativas, como por ejemplo, que una persona pueda ir presa por ser responsable de una carrera de galgos, mientras que otra que cometió homicidio, puede quedar libre.
Asimismo, abundó sobre este punto: "Tenemos jueces que aplican de un modo diverso el Código Penal, como por ejemplo las penas en suspenso: las penas en suspenso, según el Código son una excepción que debe ser justificada, mientras que hoy la jurisprudencia es exactamente lo contrario; aquí la norma son las penas en suspenso y la excepción es cuando deben ir a cumplir las penas en prisión", lamentó.
Garavano razonó que así que como hay gente que "a lo mejor" no está presa y debería estarlo, también "hay otra" que está en la cárcel indebidamente: "Tenemos un sistema que funciona con muchas dificultades e incongruencias", insistió. "La idea del Gobierno es tratar de dar a todas las incongruencias una mirada integral, donde todos estos aspectos estén considerados", subrayó.