El Congreso de la Nación vivirá semanas interesantes antes de que queden inauguradas oficialmente las sesiones ordinarias de 2015, el próximo domingo 1 de marzo. En las próximas semanas, el Frente Para la Victoria buscará aprobar los cuestionados acuerdos económicos que Argentina firmó con China, un debate que iría pegado a la sanción de la nueva Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
Los dos proyectos deben pasar primero por el debate de comisiones de la Cámara de Diputados: el de la “nueva SIDE”, que ya tiene media sanción en el Senado, por las de Asuntos Constitucionales y de Justicia; y los acuerdos comerciales por la de Relaciones Exteriores. Todo indica que el kirchnerismo lograría los dictámenes sin mayores problemas.
Los textos pasarían después al recinto, en una sesión extraordinaria del miércoles 25 de febrero. El oficialismo tiene los 129 votos para lograr el quórum y aprobarlos “a libro cerrado”, es decir, como paquetes enteros y sin poder debatir cada artículo de las futuras leyes. Por eso, la oposición se divide entre dos posturas: asistir a la Cámara y plantear sus diferencias, o “pegar el faltazo” para no convalidar los proyectos. Una “grieta” que se profundiza por las diferencias que generan los acuerdos con China.
Para la diputada del socialismo de Santa Fe, Alicia Ciciliani "existe mucha preocupación" por la rapidez con la que el oficialismo planea cerrar el tema China. "Nos parece una negociación poco favorable para el país, es una visión del gobierno de cortísimo plazo", dijo en diálogo con Perfil.com, al tiempo que consideró que se buscó "conseguir financiamiento en corto plazo y perdiendo la mirada estratégica de desarrollo del país".
Por otra parte, la legisladora criticó los detallados en los cuales se afirma que habrá obras sin licitación pública, ya que "estamos violando y resignando toda la legislación laboral en pos de un financiamiento externo".
Miguel Angel Calvete, Director Ejecutivo y vocero de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas en la Argentina, en cambio, señaló a este portal que "los acuerdos son positivos", a pesar de que "se cuestionan algunos aspectos". Sin embargo, "el acuerdo marco es beneficioso para el país".
El convenio concede condiciones de igualdad laboral para chinos y argentinos porque, antes de su aprobación en el Senado, el Jefe del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto, anunció un cambio en el artículo sexto del convenio para proteger a los trabajadores argentinos ante las quejas de algunos sectores del sindicalismo", señaló en un comunicado.
Diputado contra ministro. Días atrás José Ignacio de Mendiguren, secretario de la UIA y diputado del Frente Renovador, había cuestionado los acuerdos bilaterales al señalar que, a partir de las cláusulas que contienen, "hemos negociado como un país de segunda". Luego, fue aún más duro: "China firmó acuerdos así en África. Exigió una cláusula de personal y hoy hay más de 200 mil trabajadores chinos en Angola".
Sin tiempo que perder, quien respondió a las críticas fue el ministro de Economía, Axel Kicillof: "Puesto así parece que (tras los acuerdos) van a venir barcos con trabajadores chinos, indocumentados y muertos de hambre. Ahora los empresarios están escandalizados cuando se la pasaron pidiendo por trabajo barato. Me llama la atención porque siempre los he escuchado pedir lo contrario, que sean peores las condiciones de trabajo con el eufemismo de la competitividad", dijo a Del Plata.
(*) De la redacción de Perfil.com. En Twitter @rindart.