Si bien todos parecen estar de acuerdo en criticar la gestión de gobierno de Néstor Kirchner, los cuatro principales candidatos a presidente de la oposición muestran claras diferencias en sus plataformas electorales con respecto a las políticas en el Mercosur.
Mientras que los candidatos de la Coalición Cívica (CC), Elisa Carrió, y de Una Nación Avanzada (UNA), Roberto Lavagna, manifiestan –con fuertes críticas a Venezuela- la importancia de fortalecer las relaciones con los países del bloque, el postulante del peronismo anti K, Alberto Rodríguez Sáa, y el de Recrear, Ricardo López Murphy, quieren una Argentina abierta a los mercados al mundo.
Con la intención de diferenciarse del Gobierno, la ex titular del ARI señaló su intención de “consolidar” el Mercosur y propuso un “mayor protagonismo” del país en América latina.
Asimismo, la CC -tal vez en línea con las políticas que desarrolló el gobierno de Kirchner-, intentará "alentar un accionar coordinado y eficaz en la ONU, la OEA y el Mercosur para la lucha contra la corrupción; fortalecer la consolidación del bloque regional, y promover un mayor protagonismo en América Latina".
Para ello, afirma el documento “Bases programáticas de Gobierno para una República Igualitaria”, será de "vital importancia" para la "prevención" y el "castigo" de los crímenes contra la humanidad, la constitución de la Corte Penal Internacional.
Una leve diferencia. Por su parte, Lavagna –quien disputa el segundo puesto con Carrió-, señaló como prioridades de su plan de política exterior la "relación estratégica con los países del Mercosur" y la "activa participación" en foros multilaterales sobre distintas temáticas.
Según el programa expuesto por el ex ministro de Economía, que llevaría a cabo en los primeros 100 días de su gestión en caso de ganar el 28 de octubre, la intención es "llevar un mensaje claro a la comunidad internacional de que Argentina ha decidido normalizar sus relaciones internacionales con todos los países".
En ese contexto, detalló que su política exterior se basa en varios principios fundamentales como la "relación estratégica con los países del Mercosur, con énfasis en la relación con Brasil, Uruguay, Paraguay y Chile (asociado)".
Una mirada a los noventa. En tanto, el candidato del Frejuli, Alberto Rodríguez Sáa –aliado con su hermano Adolfo y el ex presidente Carlos Menem, entre otros dirigentes-, afirmó en declaraciones a la agencia DyN, que “es necesario repotenciar el Mercosur porque así como está, no sirve para nada”.
En ese sentido, el gobernador de San Luis, destacó la necesidad de “volver a insertar a la Argentina en el mundo para terminar con el aislamiento”, mientras que agregó que el país “debe repensarse” en materia de política exterior.
Rodríguez Sáa señaló que “es necesario terminar con la Argentina Chávez-dependiente”, en referencia a las estrechas relaciones que establecieron Kirchner y el presidente de Venezuela en los últimos años.
Finalmente, el candidato de Recrear López Murphy, sin poner el acento en el Mercosur, se pronunció a favor de salir a conquistar nuevos mercados y alianzas, respetando las reglas que le impone su participación en las instituciones de orden mundial vigentes, tales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) entre otros organismos.
Fiel a su estilo, el proyecto lopezmurphista afirma que el eje de su política exterior debe orientarse al respeto de las libertades fundamentales, la preservación y la búsqueda de la paz, la práctica de la democracia política, aunque añadió una novedad: el respeto de los derechos humanos.
De esta forma, tanto Carrió y Lavagna como Rodríguez Sáa y López Murphy, pese a mostrarse similares a la hora de criticar al gobierno, manifiestan distancias entre sí a la hora de las propuestas que piensan llevar adelante, si alguno de ellos resulta electo presidente el 28 de octubre próximo.
