Con apenas una de sus empresas, y en sólo cinco años, Lázaro Báez cobró de parte del gobierno nacional casi $ 800 millones de pesos, una cifra que pone en duda la veracidad de los mil millones de pesos que Cristina Kirchner reconoció que se le pagó al Grupo Austral durante los doce años de gestión kirchnerista.
Según los registros oficiales, desde el Tesoro Nacional se le pagó a la firma Kank y Costilla –que junto con Austral Construcciones y Gotti Hnos. son las empresas del grupo de Lázaro Báez– $ 791 millones entre 2010 y 2014. Allí se contabilizan obras en Santa Cruz, Chubut y Formosa. La información a la que tuvo acceso PERFIL no cuenta con el detalle de los cobros que las otras dos empresas de Lázaro pudieron haber cobrado desde 2003 ni las obras licitadas por las provincias u organismos descentralizados.
Otro aspecto destacable es que Kank y Costilla es la única firma que accedió a todos sus contratos sin la necesidad de tener que conformar una alianza con otras empresas, algo que hoy es una norma.
Cómo reveló PERFIL en su edición de ayer., el empresario, íntimo del matrimonio Kirchner, sufre el aislamiento del resto de los grandes constructores. Uno de los pocos que se animó a acercarse fue Angelo Calcaterra, de Iecsa, con quien se asoció para participar de la licitación por la construcción de las represas en Santa Cruz.
Justamente, Calcaterra, quien además es primo de Mauricio Macri, es otro de los que consiguió muchos contratos con el kirchnerismo. Y fuentes del sector dudan de que se deba a su parentesco con la familia Macri. Desde 2008, cobró $ 1.455 millones del gobierno nacional.
Cristóbal López y Carlos Wagner son otros de los empresarios que fueron beneficiados por Cristina. López compró la constructora CPC en 2009 y desde 2010 realizó obras que le significaron pagos aproximados por $ 1.110 millones (muchas compartidas en UTE). Wagner es sindicado como el “preferido” de Cristina. Cobró $ 1.243 millones. Hizo el Centro Cultural Néstor Kirchner (junto a Riva), entre otras obras.
La lista de Cristina
El 20 de agosto, por cadena nacional, Cristina Kirchner hizo alarde de que durante el kirchnerismo se hizo “capitalismo de enemigos”. Mostró un listado, confeccionado por Julio De Vido, en el que Lázaro Báez figuraba en el puesto 40 entre los más beneficiados con obra pública en los doce años de kirchnerismo, con apenas el 0,3% del total.
Ese listado, sin embargo, fue puesto en duda por gran parte de los actores del sector, que no entendían qué datos se tomaban en cuenta. Además, no contaba las obras que fueron licitadas por las provincias u organismos descentralizados, aunque casi siempre se hicieron con fondos de la Nación.
Esa vez, el Gobierno reconoció que el Grupo Austral había hecho obras por un total de $ 1.019 millones en los doce años. Incluían obras de Austral Construcciones, Kank y Costilla y Gotti Hnos. La información a la que accedió PERFIL muestra que Kank y Costilla sola, desde 2010, cobró casi $ 800 millones. Techint, primero en ese listado, casi no registra cobros.