El presidente Néstor Kirchner quiere recuperar el cadáver del general Juan Domingo Perón para la izquierda peronista y ofrendarlos para "la unidad nacional". Para eso, pensando en el traslado a San Vicente de su cuerpo, que se realizará el próximo martes a las 11.30, Kirchner desinvitó a su par venezolano Hugo Chávez y a su antecesor Eduardo Duhalde.
Para esto, el Presidente le ordenó al titular de la CGT, Hugo Moyano, y a Gerónimo Venegas, secretario de las 62 organizaciones y responsable del acto, que desactivaran la invitación que le habían enviado a Chávez y se encargaran de limitar el acceso de Duhalde. El martes, Kirchner no quiere al lado nadie que pueda hacerle sombra.
La orden de desinvitar a Chávez fue automáticamente cumplida. El embajador venezolano en Buenos Aires, Roger Capella Mateo le confirmó a Perfil que su presidente no presentará la ceremonia. "No tengo información oficial sobre una posible visita", explicó el diplomático.
En tanto, de Duhalde se ocupó su ex aliado, el actual kirchnerista José María Díaz Bancalari. El ex mandatario, autor original de la idea y de la comisión pro mausoleo aportó el renunciamiento."Duhalde irá a la CGT para rendirle homenaje a Perón. Así se reafirmará que los protagonistas de este hecho histórico son Perón y los trabajadores", sostuvo a Perfil un vocero del ex presidente.
"Kirchner no quiere liturgia peronista. No quiere una procesión por el General. Quiere que lo adoren a él y por eso quiere desperonizar a Perón", se quejó un diputado que se anotó en la lista de los que quieren cargar en sus hombros el féretro del General.