El norteamericano tomó la iniciativa y marcó diferencias claras en el primer round (3-0) y de ahí en más aprovechó la desesperación de Maderna, quien desordenadamente fue a buscar achicar diferencias pero abrió mucho su guardia permitiendo que su rival fuera ampliando la diferencia.
Al cabo del segundo asalto el argentino ya caía 7-1, en el tercero perdió 8-2 y en el último finalmente recibió una buena combinación sobre el inicio de la vuelta que derrumbó definitivamente su ilusión.
Maderna ya había caído con Estrada en el Preolímpico de Guatemala, donde el estadounidense se impuso por una diferencia menor (4-1) pero también clara.
De esta manera, el boxeo, la disciplina que más medallas le dio a la Argentina a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos, se quedó prematuramente sin representantes.