"En los últimos días se han producido hechos que lastiman el libre ejercicio del periodismo en la Argentina. El señalamiento público del periodista Joaquín Morales Solá por parte del presidente de la Nación, Dr. Néstor Kirchner, son para la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) acciones que se alejan de los buenos hábitos de tolerancia y disenso civilizado que caracterizan a las democracias modernas.
"En una sociedad abierta, el primer mandatario tiene el incuestionable derecho de expresar sus opiniones y manifestar sus críticas, pero no debe olvidar que, como presidente de todos los argentinos, debe cuidar la integridad moral, intelectual y física de cada uno de los ciudadanos.
En consecuencia, el alto lugar que ocupa en la pirámide institucional lo obliga a cultivar la virtud de la prudencia, ya que cualquier palabra destemplada puede inducir interpretaciones equivocadas y conductas peligrosas en personas o grupos proclives a la violencia.
"En este sentido, ADEPA ve con preocupación las reacciones de sectores que, después de escuchar discursos presidenciales como el que motiva esta reflexión, anuncian actos de protesta contra diarios que asumen posiciones críticas o en los que escriben columnistas que expresan ideas o posturas que divergen de concepciones, acciones o políticas del gobierno. Así, el acto contra el diario La Nación, anunciado por una agrupación piquetera, representa un intento de “escrachar” la diferencia, lo que comporta, a la vez, un flagrante menoscabo de la democracia".