Un estudio privado reveló que siete de cada 10 argentinos manifestaron que asistirán a votar en las próximas elecciones, mientras que los otros tres de cada 10 se mostraron desinteresados y aseguraron que el domingo se quedarán en sus hogares.
Según un relevamiento realizado por la consultora Delfos en todo el territorio nacional, prevé que nuevamente disminuirá el nivel de participación electoral en los comicios del domingo, y que será el menor desde el retorno de la democracia en 1983.
Desde el fin de la última dictadura militar hasta la actualidad el índice de participación muestra una tendencia descendente. El informa destaca que "el porcentaje más alto de votantes se registró en la elección en la que el ex presidente radical Raúl Alfonsín fue electo donde votó el 86 por ciento del padrón. Sin embargo, en los comicios posteriores este indicador fue bajando".
El trabajo de Delfos asegura que en 1989, en la primera victoria de Carlos Menen voto el 85 por ciento; en su reelección de 1995 participó el 82 por ciento y el mismo indicador se registró en el triunfo de Fernando De la Rúa en 1999.
En el 2003 en tanto, sufragó el 78 por ciento del padrón y de acuerdo al sondeo el próximo domingo lo hará el 70 por ciento.
Del análisis de la potencial participación por edad surge que los jóvenes (18 a 29 años) irán a sufragar en mayor cantidad que los adultos de 30 a 49 años: 70% contra 68%. Mientras que el 74 por ciento de los mayores (50 a 65 años) participará, las personas de tercera edad -al no tener la obligación de participar- son los que en mayor medida desisten de hacerlo, 57%.
Las regiones del país donde menos gente manifestó que asistirá a votar son el Noreste argentino (NEA) y Capital Federal donde se prevé que votará menos del 70 por ciento del padrón. En el otro extremo aparece el Noroeste donde seguramente influenciado por las elecciones para gobernador en Salta y Jujuy se registró el nivel más alto de voluntad de voto: 77 por ciento.
En conclusión, de las 2.250 encuestas domiciliarias realizadas en todo el país a persona en condición de votar, se desprende que de confirmarse esta proyección mostraría que en 24 años de democracia un 16 por ciento de argentinos perdió total interés en los procesos electorales.