El campo se movilizó al Congreso y reinstaló la carpa verde en la plaza, como símbolo del reclamo del sector por soluciones concretas a sus problemas. Sin embargo, el clima de fiesta que vivían los ruralistas se empañó por una amenaza de bomba en el lugar.
Este mediodía, tras una movilización junto a piqueteros opositores al gobierno de Cristina Fernández, el campo armó la "carpa verde" que recibió una nutrida cantidad de visitas de dirigentes políticos, productores agropecuarios y público en general. En horas de la tarde, una amenaza de bomba obligó a una brigada de explosivos de la Policía Federal a vaciar la tienda y buscar con perros el explosivo.
No es la primera vez que la carpa verde es escenario de extraños episodios. Durante el extenso conflicto del campo, un joven fue apuñalado cuando el dirigente entrerriano Alfredo De Angeli visitaba el "santuario" rural en medio de la plaza de los Dos Congresos. El joven primero aseguró que había sufrido un puntazo al defender a De Angeli de un atentado, pero después manifestó que le habían pagado para simular y denunciar el hecho.