Tras el rechazo de la Cámara a la reapertura de la denuncia del exfiscal Alberto Nisman contra la exPresidenta, la causa parecía naufragar. Sin embargo, la declaración del exvicecanciller kirchnerista, Roberto García Moritán, provocó un cisma en Tribunales: marcó un viraje en las relaciones exteriores con Irán durante la Presidencia de Cristina y fue lapidario sobre el Pacto con Irán.
El juez Claudio Bonadio, quien reactivó la denuncia de Nisman por presunto encubrimiento de los iraníes acusados de perpetrar el atentado terrorista de la AMIA, había pedido una serie de medidas de prueba: documentos de la Cancillería, del Congreso y de Inteligencia vinculados con los tratados con Irán, pidió antecedentes del piquetero y exfuncionario K Luis D'Elía, durante su paso como titular de la Subsecretaría de Tierras, también había solicitado la declaración de testigos como periodistas y diplomáticos.
El exvicecanciller declaró, en esta causa, ante el magistrado Bonadio: "No tengo la menor duda que el Memorando de entendimiento perseguía la impunidad de los presuntos responsables del atentado a la AMIA, de lo contrario es difícil entender que se haya redactado el punto séptimo y que solo bastara la firma del acuerdo para su entrada en vigor sin la aprobación parlamentaria, como el resto de los tratados", según consta en el expediente judicial que reveló TN.
García Moritán marcó un punto de inflexión en las relaciones exteriores del país con Irán durante la Presidencia de Cristina Kirchner ya que durante el gobierno de Néstor la postura había sido la de "no negociar" con el país de Oriente Medio.
El propio Moritán, en diálogo con diario PERFIL, había manifestado que “la instrucción que teníamos nosotros por parte del presidente Kirchner era rechazar cualquier aproximación de parte de Irán que no estuviera dirigida a cooperar con la Justicia argentina. En ese momento Irán acercó una propuesta similar al Memorándum de Entendimiento, y fue firmemente rechazada”.
El diplomático también detalló que Nisman había sido amenazado en una reunión en la Interpol, en Francia. Allí los iraníes tenían "el objetivo principal era lograr el levantamiento de las circulares rojas" y le consultaron al director general del organismo seguridad internacional, Ronald Noble, quien "contestó que existían dos formas: una por pedido del juez de la causa AMIA y otra a través de un acuerdo de partes".
Quién es. Roberto García Moritán es un diplomático con basta experiencia en la carrera diplomática. Entre 2000 y 2003 fue Director de Política Latinoamericana con el canciller Adalberto Rodríguez Giavirini. También integró la Subsecretaría de Política Exterior con Rafael Bielsa. En 2005 fue designado vicecanciller del exministro de Relaciones Exteriores, Jorge Taiana.
En 2008, García Moritán dimitió a su cargo por desacuerdos con la política exterior del gobierno de Cristina. El presidente Mauricio Macri lo convocó para acompañarlo a la Cumbre de Seguridad Nuclear.
