La administración Kirchner, por medio de uno de sus voceros, el jefe de gabinete Alberto Fernández, salió hoy a dar un último espaldarazo a la iniciativa reeleccionista del gobernador de Misiones, Carlos Rovira.
"Es una pena que algunos que conforman esta oposición salgan a criticar la reelección del gobernador Rovira cuando fueron los mismos que impulsaron la re-reelección de (Carlos) Menem", dijo Fernández en declaraciones a la agencia DyN. Fernández fue parte del equipo de gobierno del ex ministro de Economía Domingo Cavallo durante la gestión de Menem.
A falta de una candidatura opositora lo suficientemente fuerte, el ex obispo de esa provincia, Joaquín Piña, encabezará la lista contraria a la del oficialismo en las constituyentes del próximo domingo. Esa lista, bautizada Frente Unidos por la Dignidad cuenta, entre otros, con la bendición de Juan Carlos Blumberg.
"Muchos de los que hoy opinan con tanta ligereza, olvidaron que cuando gobernaron el país, dejaron un desastre inmenso y eludieron siempre la responsabilidad que tuvieron cuando fueron gobierno", abundó el ministro de Gobierno nacional.
"Parece asombroso que los que dicen reclamar una mejor calidad institucional, hayan otorgado facultades descomunales a algún ministro dejando al gobierno y a las instituciones en la peor degradación republicana", disparó Fernández.
Kirchner -frente a las múltiples irregularidades denunciadas, y al violento ataque de diferentes sectores que cuestionaron la oportunidad de la reforma- decidió no viajar a Misiones a darle personalmente su apoyo a Rovira, enfrentado al ex presidente de transición Ramón Puerta.
Sin embargo, el gobierno nacional no retaceó apoyo político (y económico), a través de Alicia Kirchner, hermana del presidente y ministra de Acción Social, y de Sergio Massa, titular del Anses.