El presidente francés, Nicolas Sarkozy, de 54 años, fue hospitalizado el domingo tras sufrir un malestar "cuando practicaba deporte", anunció la Presidencia.
Según anunció posteriormente su entorno, fue internado en el hospital militar de Val-de-Grâce en Paris, donde suelen ser hospitalizados los jefes de Estado y las altas personalidades.
El jefe del Estado se encontraba en el momento de sufrir el malestar en su residencia de La Lanterne, en Versalles, a unos 20 km al oeste de París, según una fuente gubernamental muy fiable.
"El presidente de la República estaba practicando deporte cuando sufrió un malestar. Fue atendido de inmediato por su médico. Actualmente está siendo sometido a exámenes complementarios", anunció en un primer momento el palacio del Elíseo, sede de la Presidencia francesa, en un comunicado.
"Se comunicarán más informaciones ulteriormente", añadió el texto. Poco después, la presidencia anunció que Sarkozy había sido hospitalizado. Muy deportivo, el presidente francés suele correr y montar en bicicleta. Un helicóptero militar fue observado volando sobre Versailles, en las afueras de París.
Según una buena fuente del entorno de Sarkozy, su esposa Carla "está ahora a su lado". Una persona que pidió el anonimato y que se paseaba por los alrededores del castillo de Versalles a comienzos de la tarde, contó a la AFP que vio a un hombre de espaldas que trotaba por un camino de la residencia de la Lanterne.
Según esta persona, el hombre estaba rodeado de guardaespaldas. Parecía fatigado y luego vio cómo se desplomó. Este testigo agregó que observó a Carla Bruni-Sarkozy, esposa del jefe de Estado, llegar al lugar en una moto. Luego, según la misma fuente, llegó un helicóptero a las dos menos cuarto de la tarde, hora local, y luego volvió a partir.
Otro helicóptero blanco llegó después y partió sin que el testigo pudiera ver quién iba dentro. Un enorme helicóptero militar fue visto sobrevolar la ciudad de Versalles. El presidente corre varias veces por semana alrededor de una hora por los jardines del Elíseo, en París.
Fuente: AFP