Fernanda Gil, la empleada de la filial de Aerolíneas Argentinas en Córdoba, reclamó ayer ser repuesta en su lugar de trabajo después de denunciar su despido presumiblemente por no militar en la agrupación La Cámpora.
Junto a su abogado, Alejandro Sánchez Kalbermatten, aseguró que presentó un recurso de amparo para recuperar su empleo. En diálogo con Ahora es nuestra la ciudad, por FM Identidad, el letrado afirmó que "está claro que se trata de un caso de discriminación laboral" y que el "caso no lo quería agarrar nadie porque es una brasa caliente y se lo patean entre ellos".
Al mismo tiempo, resaltó que existen "vueltos y aprietes en la justicia" y "cuesta ir para adelante en una acción como ésta en que el Presidente de Aerolíneas es parte de La Cámpora y está presente en todos los actos de gobierno".
Gil señaló que en estos diez meses que lleva desempleada "nadie me dio una respuesta ni me mostró la hoja de desempeño".