La médica cubana Hilda Molina arribó en horas de la madrugada al aeropuerto de Ezeiza, donde se reencontró con su hijo y la familia de él, poniendo fin así a una separación de años que comenzó cuando el joven dejó la isla.
Cristina Fernández de Kirchner había anunciado el viernes que Molina vendría al país. La médica anunció, antes de dejar Cuba, que no tiene intenciones de radicarse en Argentina.
"Voy a la Argentina a asistir a mi madre y después regreso, como prometí siempre", afirmó neoricirujana en declaraciones radiales.
"Voy a la Argentina a asistir a mi madre y después regreso a Cuba, como prometí siempre", aseveró Molina. La médica ex castrista relató que “hoy me dieron el permiso y me dijeron que podía volver a Cuba cuando lo desee, pero ellos saben que yo voy a asistir a mi madre y cuando ella se reponga vamos a regresar, porque no me quiero quedar en la Argentina”.