Estaba todo listo para que la Rosario socialista le cumpla el deseo a Cristóbal López: la comisión de Gobierno del Concejo Municipal de Rosario había dado despacho al pedido del empresario para que el casino local llamado City Center pueda abrir sus puertas durante las 24 horas los viernes, sábados y vísperas de feriado. Solo restaba que sea tratado en el recinto de sesiones, pero un inesperado llamado desde Buenos Aires frenó todo.
Sin debate, sin obstrucción de ningún bloque y casi como un trámite exprés, los concejales del Frente para la Victoria y del Partido Socialista, con el aval de la UCR y el PRO, habían dado el “ok” a ese expediente en la tarde del miércoles. El jueves sería tratado por el pleno del Cuerpo y ya contaba con los votos necesarios para ser aprobado definitivamente.
Pero según pudo saber Perfil.com, un puñado de concejales recibió un llamado de la producción del programa de televisión Periodismo Para Todos, quienes haciéndose eco de esta nueva medida que, con la venia del binnerismo beneficiaba al empresario, tenían la intención de realizar un informe en la transmisión del domingo. La noticia, al ser expuesta en la pantalla de El Trece, iba a tomar una trascendencia mayúscula, implicando un alto costo político que ni kirchneristas ni socialistas estaban dispuestos a pagar. “Recibí un llamado de Buenos Aires y me vi en la obligación de transmitírselo a mis colegas, porque el tema venía bastante pesado”, señaló el concejal de la CC-ARI Oscar Greppi, quien ya había adelantado su voto negativo. Con este escenario, los integrantes de Gobierno tomaron la decisión de retirar la firma, dejando que ese expediente siga descansando cómodo en algún cajón como desde hace casi dos años.
“Si bien de palabra en la reunión de la comisión se había aprobado, luego no se reunieron las cuatro firmas necesarias para que sea tratado en el recinto, por eso no prosperó”, explicó Daniela León, presidenta de la comisión de Gobierno, una de las cuatro ediles que impulsaron el tema. A ella se sumaron Manuel Sciutto, presidente de la bancada socialista, de Roberto Sukerman del FPV y Roy López Molina, del PRO.
El kirchnerismo tenía la intención de ser complaciente una vez más con el zar del juego. Y los socialistas -históricamente acérrimos detractores de los casinos-, habían dado el visto bueno a la extensión horaria sin poner reparos ni solicitar una contraprestación por la licencia otorgada, tal vez porque veían en el incremento de los aportes por derechos que comenzaría a pagar City Center su más concreta posibilidad de acrecentar sus arcas. Pero para lograr la aprobación definitiva, necesitaban contar con los votos del PRO, quienes ante el temor de quedar expuestos en un programa televisivo de alcance nacional, no quisieron ser los primeros en abrirle el juego a Cristóbal López para que expanda sus negocios en la ciudad.
El pedido. En febrero de 2012 ingresó el expediente 193.269 por Mesa de Entradas del Concejo Municipal. City Center Rosario solicitaba en el mismo que los viernes, sábados y vísperas de feriado el casino pueda funcionar sin restricción horaria. La principal razón esgrimida por la firma era tener un trato “igualitario” en relación a sus competidores más cercanos: el casino de Santa Fe y el de Victoria, en Entre Ríos, donde este permiso está otorgado. Además, argumenta su solicitud mencionando fragmentos del pliego de bases y condiciones: “El otorgamiento de la explotación del Casino de la ciudad en concesión tuvo por objetivos la de fomentar el desarrollo de medidas de promoción turísticas y culturales en general”. Adjunta a modo de aval una encuesta realizada por el Ente Turístico Rosario (ETUR) en donde consta el crecimiento exponencial del turismo en Rosario, sobre todos los fines de semana, en más de un 200% con respecto a 2011.
También expresan en el pedido que el horario ampliado de las salas de juego “incrementará los parámetros del turismo internacional”, con las ventajas para la ciudad que ello significa. En tanto, no dejan de mencionar los aumentos en los ingresos para la Municipalidad en concepto de DREI (Derecho de Registro e Inspección) y Derechos de Accesos, y la del acrecentamiento en la planta de personal permanente “en una cantidad no inferior a 90 trabajadores”.
No va más. La misma situación que esta semana se vivió en el Concejo local se había desarrollado un año atrás mediante un procedimiento similar: la iniciativa había conseguido el despacho de la comisión de Gobierno, con los mismos votos que en esta oportunidad. A diferencia de este año que casi pasó desapercibido, por entonces todo se desarrolló en medio de un escándalo, y hasta un concejal –que en estas últimas elecciones encabezó la lista del FPV- amenazó con renunciar a su banca si finalmente el proyecto veía la luz. Como una bola que no se decide ni por el colorado ni por el negro para caer, el pedido para modificar el horario los fines de semana, nuevamente seguirá girando, a la espera de conseguir los consensos.
(*) Especial para Perfil.com.