Kirchner le respondió a la Iglesia: "Cuidado que el diablo llega a todos"

El presidente Néstor Kirchner volvió a cargar contra la Iglesia en una semana de polémicas. “Ciudado que el diablo llega a todos, a los que usamos pantalones y a los que usan sotanas”, para contestar a las expresiones vertidas por autoridades del catolicismo local.

“Algunos sectores se ponen nerviosos porque generamos trabajo”, dijo en un acto que se desarrolló en Tres de Febrero en la inauguración de una fábrica de automóviles.

“El secretario del arzobispado dijo que este es un presidente de la discordia. Yo peleo contra la injusticia, por el pueblo, por la Patria, por aquellos que no tienen trabajo, si eso es sembrar discordia, entonces soy un presidente de la discordia”, señaló en referencia a Guillermo Marcó vocero del Arzobispado de Buenos Aires que preside el monseñor Jorge Begoglio.

Luego, ratificó la política de derechos humanos del actual gobierno. “Hay que juzgar los crímenes de la dictadura”, dijo para luego mencionar a Jorge Julio López, a quien llamó “amigo”. “Va a haber justicia”, prometió y agregó: “no tengo miedo”.

“Como dije en Misiones, hay un Dios que es de todos. Pero cuidado –advirtió- el diablo anda por todos lados y puede estar con los que usamos pantalones y también con los que usan sotanas”, cargó contra los hombres de la Iglesia Católica.

“Estamos poniendo todo nuestro esfuerzo, no me van a hacer callar la boca, no me van a hacer retroceder”, afirmó.

Contra la prensa independiente. El Presidente también apuntó contra la prensa. “Hay sectores del periodismo que dicen que no se respeta la libertad de prensa porque no hablo con ellos. Yo hablo directamente con el pueblo”, definió.

"Podemos construir una Argentina diferente, como la que soñaron nuestros abuelos. Una Argentina amplia y no sectaria, donde se respete la decisión de la gente porque muchas veces la verdad relativa de uno ayuda a la del otro", dijo el presidente

Y siguiendo con las metáforas místicas finalizó con una expresión de deseos: “Estamos en el infierno” pero “para el final de mi mandato, el 10 de diciembre de 2007, espero que lleguemos al purgatorio”.