El titular del PJ, Néstor Kirchner, avanza en una estrategia para evitar la fuga de los dirigentes díscolos del partido. Y en esa prueba de fuego, se verá hoy con el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia, Horacio González.
Gónzalez y un grupo de legisladores bonaerenses protagonizaron en el verano que pasó un publicitado encuentro en Pinamar, en el que repartieron críticas al oficialismo. Sin embargo, con el tiempo, logró mantener las visitas a Olivos y encauzar el diálogo con el ex presidente.
La semana pasada, Kirchner ya había almorzado con el intendente de Tigre, Sergio Massa y el de Bahía Blanca, Cristian Breitenstein. El ex jefe de Gabinete de Cristina no ha tenido reparos en cuestionar políticas del gobierno y se ha dejado fotografiar, incluso, con enemigos públicos como Martín Redrado, ex titular del Central .
El patagónico busca conformar una "mesa grande" de dirigentes, desde Daniel Scioli a Hugo Moyano pasando por Massa y Florencio Randazzo, para ordenar el partido habida cuenta que su titular en la provincia, Alberto Balestrini, continúa internado y no reasumirá en el corto plazo.
El ex jefe de estado, con la mirada puesta en 2011, busca convencer al resto que el mejor negocio es participar de las internas: "Es la única forma de evitar una segunda vuelta y de que ganen los radicales", se le escuchó decir, según publicó La Nación.