Kirchner se acordó de reunirse con los diputados K

El presidente Néstor Kirchner encabezó anoche su primera reunión, tras cuatro años de gobierno, con los integrantes del bloque del Frente para la Victoria de la Cámara de Diputados, a quienes agradeció su respaldo desde el Congreso y la aprobación de leyes estratégicas para su gestión.

Como es habitual, Kirchner también fustigó a los dirigentes de la oposición que, según expresó, "creen que cuestionando, agraviando, pueden recuperar el terreno que la sociedad no les da" a través de los votos. "Si somos tan malos y ganamos, qué deberá pensar la sociedad de ellos, que perdieron", se preguntó Kirchner, en un giro que generó el aplauso de los diputados distribuidos en las mesas del restaurante Rodizio, de Costanera Norte.

El cierre de su discurso fue coronado por las estrofas de la marcha peronista, que Kirchner también entonó sonriente.
"Ahora van a decir que no soy peronista", ironizó luego. El presidente repartió elogios variados a los legisladores que terminan su mandato, dijo que integraron la Cámara "del valor y el coraje", transmitió su "agradecimiento eterno" pero también envió señales hacia el futuro. "Yo me voy, feliz de haber sido presidente, pero no me voy de la vida política, bajo ningún aspecto", enfatizó. "Voy a seguir trabajando como un argentino comprometido", agregó.

Al lugar asistieron 95 diputados de los 112 que integran el bloque. Kirchner llegó poco antes de las 22 y enseguida se abrazó con los comensales, se sacó fotos y repartió saludos. La reunión comenzó en un marco de gran expectativa por parte de los legisladores, ante el carácter inédito de la convocatoria. Entre otros, concurrieron Carlos Kunkel, Cristina Alvarez Rodríguez, Alberto Balestrini, Agustín Rossi, Eduardo Fellner, Francisco Gutiérrez, Diana Conti, Remo Carlotto, Patricia Vaca Narvaja y Oscar Lamberto, además de Oscar Parrilli y Carlos Zannini.

Los diputados habían sido informados recién a las 19 y sorprendidos por la invitación. "Son innumerables las conquistas que hemos logrado entre todos", les dijo Kirchner a los legisladores, tras aludir a la derogación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, y la sanción de la nueva ley de Educación, entre otras iniciativas.

El nexo entre el presidente y los legisladores para la organización de la reunión fue el titular de la Cámara baja, Alberto Balestrini, quien en diciembre abandonará su cargo para asumir como vicegobernador bonaerense. "Se hace porque me voy", bromeó Balestrini ante sus allegados, al ingresar al restaurante.

Kirchner tomó la palabra tras breves discursos del titular de la Cámara y el presidente del bloque, Agustín Rossi. "No somos populistas, somos populares", definió el jefe del Estado y criticó a los defensores del "neoliberalismo" y "la teoría del crecimiento de unos pocos, el famoso derrame del vaso que nunca llegó".

Al comienzo de la velada, Rossi había dicho que el objetivo del encuentro era hacer una "pequeña despedida" a los miembros del bloque que se van. "En ningún momento, en ninguna situación, yo sentí que el bloque no estaba solidariamente unido", agregó. Minutos después, Balestrini aseguraba a Kirchner que había producido "la revolución que todos los argentinos nos merecíamos". La reunión entre el bloque y el presidente había sido un largo reclamo de la bancada desde la asunción de Kirchner.